CAPITULO 9

 

―Entonces, ¿Te gusta estar acoplado a un hombre lobo?― preguntó Jungkook mientras se sentaba en el lateral de la cama y se apoyaba en el codo para mirar hacia arriba a Taehyung con curiosidad.

 

Taehyung no pudo evitar sonreír.

 

―No sé si es lo mismo que estar acoplado a un ser humano, pero yo no lo cambiaría por nada del mundo.

 

Jungkook asintió con la cabeza.

 

―Sé lo que quieres decir. Hay algo acerca de los fuertes tipos alfa que hace que te bombeé la sangre, ¿no?

 

―Y aún más― dijo Taehyung ―. Hemos estado juntos por poco tiempo, pero no puedo ni siquiera imaginar estar con nadie más. Yoongi es así, bueno, él es sólo tan...

 

―¿Caliente? ¿Sexy? ¿Totalmente, demasiado sexy?

 

―¡Sí!

 

Jungkook rodó sobre su espalda, suspirando profundamente.

 

―No sé si ésta es nuestra recompensa por todos esos años de infierno que hemos pasado o qué, pero ciertamente me parece que hemos llegado a la cima.

 

―Yoongi dice que soy su recompensa por ir en contra de los deseos de varios miembros de su manada. No querían enviar a Namjon y Jin para ayudar, pero lo hizo de todos modos. Él dice que soy su recompensa por hacer algo en lo que no ganó nada más que saber que había hecho lo correcto.

 

Jungkook sonrió.

 

―Podría estar en lo cierto, supongo, pero tal vez la recompensa es en ambos sentidos.

 

―¿Por qué dices eso?―preguntó con curiosidad mientras Taehyung se tendía junto a Jungkook en la cama.

 

 Jungkook rodó de regreso a su lado, apoyándose en el codo, una vez más.

 

―Piensa en ello, Taehyung. No somos exactamente del tipo luchador. No somos tan fuertes como ellos lo son. Necesitamos a alguien para protegernos. Pero ellos necesitan alguien para amarlos, sólo a ellos.

 

―¿Te  refieres  a  alguien  para  hacerles  la  vida  más  fácil?―  preguntó Taehyung, empezando a entender a dónde quería llegar Jungkook con sus palabras.

 

―Exactamente. Somos extraños, inusuales, no el...

 

―Quieres decir que estamos locos― dijo Taehyung con sarcasmo.

 

―En cierto modo, si. No fuimos educados de un modo normal. Demonios, la mitad de nosotros usa esmalte de uñas porque no sabemos que se supone que no debemos usarlo. En cierto modo, eso trabaja a nuestro favor, en cuanto a lo que a nuestros compañeros se refiere.

 

―¿Cómo es eso?

 

―Debido a que no sabemos que no deberíamos amarlos de la forma en la que lo hacemos, y ese es el tipo de amor que ellos necesitan ―dijo Jungkook―. Esa es la clase de amor que tenemos que ofrecerles.

 

―No podría estar más de acuerdo.

 

Tanto Jungkook como Taehyung gritaron y se volvieron para ver a Yoongi en la puerta. Taehyung dejó escapar un profundo suspiro, mirándole.

 

―Te juro que le voy a atar una campana alrededor del cuello.

 

―Pero me entero de las cosas más interesantes de esta manera. ―Yoongi sonrió mientras caminaba hacia el lado de Taehyung en la cama y se sentó a su lado. ―Ahora, ¿Estabas diciendo algo acerca de mí siendo totalmente, demasiado sexy?

 

Taehyung entornó los ojos mientras miraba hacia atrás a Jungkook.

 

 ―Perdónalo, por favor. Su pie es más grande que su boca, pero aún así trata de comérselo. ―Él gritó y se frotó la nalga después de que Yoongi le pellizcara.

 

―¡Yoongi!

 

―Hay que ser agradable, Taehyung― Yoongi gruñó.

 

―¿Ya estas causando problemas, Taehyung?― dijo Hoseok desde la puerta, interrumpiendo la respuesta sarcástica de Taehyung.

 

―¿Yo?― preguntó Taehyung, tratando de parecer inocente y fallando miserablemente.

 

―Sí, tú. ―Hoseok se sentó al lado de Jungkook, atrayéndolo a sus brazos― Siempre parece estar en el meollo de las cosas, como mi propio bebé aquí presente.

 

―Oye, yo no me meto en tantos problemas― se quejó Jungkook.

 

―No se trata de meterse en problemas, bebé. Esa es la diferencia. De alguna manera, creo que Taehyung se mete en problemas sólo para hacer la vida de Yoongi más interesante― dijo Hoseok, con la mano recorriendo el brazo de Jungkook para calmarlo.

 

―No― murmuró Taehyung.

 

―No, tú sólo golpeas a la gente en la cabeza con bandejas para bizcochos ―dijo Yoongi―. Incluyéndome.

 

―¿Golpeas a Yoongi con una bandeja para hornear?― Hoseok le preguntó con asombro.

 

―Y a Jimin― agregó Yoongi.

 

―Ellos estaban luchando en mi cocina― dijo Taehyung, mirando a Yoongi de nuevo.

 

Jungkook se rió.

 

―Oh, bueno, eso lo explica todo.

 

―¿Estás seguro de que no le hará daño a Jungkook?― preguntó Taehyung unos minutos más tarde, ya bajando las escaleras. Se estaban preparando para hacer frente a Douglas con lo que sabían y tratarían de averiguar, lo que aún no.

 

―Hoseok va a estar con él y me dijo que lo detendría al minuto en el que Jungkook sintiera algún tipo de dolor. No lo pediría si no fuese necesario, bebé― le dijo Yoongi.

 

―Lo sé. Odio la idea de que Jungkook sienta dolor. Recuerdo lo mucho que siempre le dolía cuando el profesor lo utilizaba. Volvía a casa después de una sesión y pasaba unos días en cama, recuperándose. Era horrible, Yoongi.

 

Yoongi se detuvo al final de la escalera para mirar hacia atrás a Taehyung.

 

―Taehyung, si estás realmente en contra de esto, buscaré otro forma de hacerlo.

 

Taehyung miró a Yoongi por un momento y negó con la cabeza.

 

―No, supongo que sabes lo que estás haciendo. Pero no dejes que le haga daño a Jungkook. No me gustaría ser la razón de que Jungkook tenga cualquier tipo de dolor.

 

―Te lo prometo, cariño. En el momento en que Hoseok o yo creamos que Jungkook sufre, lo pararemos y lo intentaremos con otra cosa. Tal vez me lo coma― afirmó con vehemencia, haciendo reír a Taehyung, que era justo lo que quería.

 

Taehyung anduvo despacio hasta donde los brazos de Yoongi lo estaban esperando y dejó que lo levantase el último par de pasos.

 

―No quieres hacer eso porque entonces después de que me muerdas, yo sabría como yo, como tú y Douglas, y ¿no sería eso muy repugnante?

 

Yoongi arrugó  la  nariz .

 

—Eewww,  si     tienes   razón.  Eso  sería  muy desagradable. Te  prefiero con sólo  un  poco de  mi ―le  dijo justo  antes  de que bajara la cabeza por un beso.                      

 

Probablemente podría haberse perdido en los labios de Taehyung si Hoseok no se hubiese aclarado la garganta.

 

―Uh, ¿Yoongi? Va a ser muy difícil hacerle frente a este tipo y parecer intimidante con Taehyung unido a tu cara.

 

Yoongi levantó la cabeza para fruncir el ceño a Hoseok.

 

―¿Me veo como que realmente me importa?

 

―No― dijo Hoseok ―, sin embargo...

 

―Sí, sí― gruñó Yoongi, rodando sus ojos.

 

Taehyung sonrió, apoyado en los dedos de los pies para dar a Yoongi un rápido beso en la mandíbula.

 

―Vamos, hombre grande, nosotros podremos besarnos todo lo que quieras después de tratar con el estúpido.

 

―Sabes, a veces ser el responsable es una mierda― Yoongi se quejó, mientras tomaba la mano de Taehyung y se iba con él a la puerta del estudio. Se detuvo, volviendo a mirar hacia abajo a Taehyung.

 

―Sabes que te quiero, ¿verdad?

 

Taehyung juntó sus cejas, confundido.

 

―Sí, ¿por qué?

 

―Yo no quiero que te molestes por cualquier cosa que yo diga cuando estemos ahí dentro. Voy a tratar de darle cuerda a Douglas y eso significa que podría decir cosas que encuentres objetables. Sólo quiero que sepas que no las quiero decir.

 

Taehyung lo pensó por un momento y asintió con la cabeza.

 

―Está bien, sólo que no te pases de la raya demasiado o podría tener que golpearte de nuevo.

 

Yoongi sonrió.

 

―Dios nos libre, bebé.

 

Miró más allá de Taehyung a donde Hoseok estaba de pie, con su brazo alrededor de los hombros de Jungkook.

 

―¿Ustedes están listos?― Tan pronto como asintieron con la cabeza, Yoongi soltó la mano de Taehyung y respiró hondo antes de abrir la puerta y caminar dentro.

 

Para Taehyung, era como observar una transformación de hombre a bestia. Un minuto Yoongi era todo amabilidad y ternura. Al siguiente se transformó en alguien que Taehyung no conocía y no le importaba conocer.

 

Sus rasgos eran como la piedra, su cuerpo estaba rígido cuando fue a sentarse en una silla frente a Douglas.

 

Taehyung estaba asombrado cuando Yoongi señaló al suelo a sus pies.

 

―Siéntate― dijo Yoongi con severidad.

 

La única cosa que contuvo a Taehyung para no partirle la cabeza, era la sonrisa satisfecha en el rostro de Douglas por la orden de Yoongi. Mantuvo los ojos  bajos, para  que Douglas no pudiera ver  el desafío            en ellos, Taehyung se acercó y  se  sentó  a  los  pies de Yoongi, levantando  sus rodillas hasta  el pecho y envolviendo sus brazos alrededor de ellas cuando se echó hacia atrás contra las piernas de Yoongi.                                                           

               

―Ahora, Douglas, ¿qué ibas a decirme de por qué tengo que gobernar con  Wendy  a  mi  lado?  ―preguntó Yoongi,  tamborileando  con  los  dedos mientras miraba a Douglas.                                                       

―Bueno, Alfa, yo…ummm… ¿No deberíamos tener esta conversación en privado?― Douglas contestó con evasivas.

 

―¿Por qué? Confío en los hombres de esta sala.

 

Douglas miró a su alrededor a los otros en la sala, ansiosamente, antes de mirar de nuevo a Yoongi.

 

―Alfa, no conozco a esos hombres.

 

―Yo sí, y eso debería ser suficiente para ti. Cada uno de ellos entiende las delicadezas... involucradas de ser un Alfa o de hacer parte de un círculo selecto. Harán lo que les diga cuando sea el momento adecuado.

 

―¿Está seguro?

 

―Completamente. Ahora dime lo que está pasando. ¿Quién hizo estos planes y por qué debería yo, estar de acuerdo con ellos?

 

―Porque es lo mejor para nosotros.

 

―¿Nosotros somos?―preguntó Yoongi.

 

―Para nuestro grupo. Nuestra manada es pequeña. Necesitamos el dinero y el nuevo territorio que este acuerdo traería consigo, si vamos a crecer. Tenemos una posición casi nula en el concejo de manadas tal y como estamos. Este acuerdo nos puede traer todo lo que siempre hemos querido.

 

―¿Cómo? ¿Cómo mi apareamiento con Wendy va a hacer eso?— preguntó Yoongi—. ¿Por qué no podemos hacerlo con Taehyung a mi lado?

 

Douglas pareció agitado por un momento.

 

―Porque eso es parte de la oferta. Wendy ha de gobernar a su lado. Además, no se puede gobernar una manada con un hombre a su lado. Simplemente no se hace.

 

Taehyung casi puso los ojos en blanco. Si Douglas sólo supiera. Podía pensar en varios hombres que tenían a otros hombres a su lado. Apostaría que había más por ahí de los que él no sabía nada.

 

―¿Crees que yo soy incapaz de gobernar esta manada por estar con Taehyung? ―preguntó Yoongi.

 

―No, por supuesto que no, pero bueno, eso simplemente no se hace, Alfa. Es un hombre y ese tipo de comportamiento simplemente no está bien, no es correcto. Usted tiene que acoplarse con Wendy para que pueda proporcionar cachorros a la manada. Esa es la manera adecuada de hacer las cosas.

 

―¿Y si no quiero dejar a Taehyung?―cuestionó Yoongi.

 

―Usted tiene que entender, Alfa, que todo este asunto depende de su acoplamiento con Wendy y de que tengan cachorros. Si usted está acoplado a él, no puede aparearse con ella. Usted no podrá proporcionar cachorros. Si eso ocurre, este acuerdo fracasa.

 

―Hay otras formas de proporcionar cachorros, Douglas. Seguramente ya lo sabes. ¿Por qué no puedo conservar a Taehyung y a Wendy a mi lado, al mismo tiempo? Hay cachorros que no tienen familia, y hay tecnología moderna que sin duda nos pueden ayudar si es necesario.

 

―Alfa…

 

Yoongi se levantó cortando a Douglas. Se acercó a la licorera y se sirvió una copa, tomando un pequeño sorbo antes de volver a mirar a Douglas.

 

— Estoy un poco cansado de esta conversación, Douglas. No tengo planes de dejar a Taehyung, nunca.

 

―Pero…pero…― Douglas bombardeada.

 

―Quiero saber quién está involucrado en este pequeño esquema tuyo y quiero saberlo ahora― dijo Yoongi cuando él asintió con la cabeza hacia Jungkook. ―Mi amigo, Jungkook, aquí presente, va a asegurarse de que no me mientas.

 

Taehyung contuvo el aliento mientras observaba a Hoseok y a Jungkook acercarse detrás de Douglas quedándose de pie. Jungkook respiró hondo, tomó la mano de Hoseok,  y  luego  puso  su  otra  mano  sobre  el  hombro  de Douglas. Taehyung  lo vio estremecerse, su cuerpo  se  hundió  un  poco  antes  de que  los brazos de Hoseok le rodearan, sosteniéndole.

 

―Ahora, ¿quién está involucrado en esto? ―preguntó Yoongi tan pronto como Hoseok asintió con la cabeza hacia él.

 

―No sé― respondió Douglas.

 

―Miente― declaró Jungkook simplemente, consiguiendo una asustada mirada de Douglas.

 

―No, no estoy mintiendo, lo juro ―dijo Douglas rápidamente con una pequeña voz estrangulada.

 

―Miente― dijo Jungkook de nuevo.

 

Yoongi levantó una ceja.

 

―Quiero la verdad, Douglas, y la quiero ahora.

 

―Alfa, yo…

 

―Mira, Douglas ―dijo Yoongi mientras volvía a sentarse. Apoyó la mano con el vaso de whisky en un brazo de la silla. Con la otra acarició suavemente el cabello de Taehyung. ―Me gusta Taehyung. Creo que es bonito. También es una pequeña y agradable mascota, ¿No te parece?.

 

―¿Mascota?― Douglas preguntó sorprendido.

 

Sí, ¿mascota? Pensó Taehyung. Se esforzó para aguantarse y no fulminar con la mirada a Yoongi. En su lugar, pellizcó su pierna, escondiendo el gesto, meneándose contra él. ¡Mascota, mi culo! Voy a mostrarle lo que es una mascota.

 

―Ciertamente no piensas que podría verlo como algo más, ¿verdad? Él es un ser humano― sonrió Yoongi, esperando contra toda esperanza que Taehyung supiera que no quería decir una palabra de lo que estaba vomitando. El pellizco de Taehyung en su pierna no presagiaba nada bueno para él.

 

Podía ver los ojos de Hoseok ampliarse con sorpresa, y la cara de Jungkook estaba sorprendida, también. Sí, lo sabía. Estaba cavando un agujero enormemente profundo. Sólo esperaba que la pala fuera lo suficientemente grande para desenterrarse después.

 

―Pero…pero, él es su pareja― exclamó Douglas con incredulidad.

 

―Sí, lo es, pero como ya he dicho, es un ser humano. Yo no lo soy. Soy un hombre lobo, el Alfa de mi propia manada. Puede que sea mi compañero, y lo haya reclamado, pero nunca será un hombre lobo. Lo sabes tan bien como yo ―dijo Yoongi con cuidado.

 

Yoongi hizo su mejor esfuerzo por no entornar los ojos cuando Douglas se sentó en  su  silla,  mirándole  un  poco  más  cómodo. 

 

—Mi  amigo Hoseok  aquí, entiende, ¿Verdad Hoseok? Jungkook es su compañero, pero ya que él también es un ser humano... ― dijo Yoongi, sonriendo ante la repentina mirada de pánico de Hoseok.

               

―Ciertamente, lo entiendo. Un compañero es un  compañero,  y  los anhelamos  como  al aire. No era  tan                estúpido  como para  dejar  pasar a mi compañero cuando lo encontré. Sin embargo, también es un ser humano. Mi padre, el Alfa de mi manada, nunca aceptaría a un ser humano en nuestra manada, tampoco yo. Así que, reclamé a Jungkook y lo convertí en mi mascota. — dijo Hoseok.

 

Yoongi podía ver a Hoseok dando un apretón en el hombro de Jungkook, mientras hablaba, los labios de Jungkook se torcieron cuando él trató de hablar. Él devolvió su atención a Douglas, sorprendido por la mirada satisfecha que se había operado en su rostro.

 

―Esto sucede más a menudo de lo que piensas, Douglas. Sé de varios hombres lobo que han tenido a sus compañeros humanos como mascotas. Eso detiene el ansia constante que tenemos de encontrar a nuestros compañeros y nos deja seguir con el asunto de dirigir nuestras manadas― dijo Yoongi.

 

―La aceptación de ellos como compañeros de lleno en la manada es algo completamente diferente, sin embargo —agregó Hoseok―. Es por eso que los convertimos en nuestras mascotas. Ya que son más fuertes y más inteligentes de lo que parecen, no tardan en aprender a hacer lo que se les dice.

 

―¿Y usted sólo desea retenerlo como su mascota? ―preguntó Douglas, vacilante.

 

―Taehyung, en pie― ordenó Yoongi, ocultando la sonrisa que trató de estallar mordiéndose el labio. Taehyung se levantó y luego dio un pellizco en la piel de Yoongi en venganza―. Dime, Douglas. ¿Parece alguien que podría gobernar a mi lado? ―preguntó Yoongi, aunque pensaba que Taehyung era la pareja perfecta para gobernar con él.

 

Douglas se quedó en silencio por un momento mientras miraba a Taehyung.

 

―No, creo que no.

 

―Dice la verdad― dijo Jungkook, recibiendo otra mirada extraña de Douglas.

 

Yoongi agarró la mano de Taehyung y tiró de él hacia abajo para sentarlo en su regazo, envolviendo un brazo alrededor de él. Suavemente le acariciaba la cadera con sus dedos mientras tomaba un trago de whisky. Dejando el vaso en la mesita junto a él, volvió a mirar a Douglas.

 

―Él es lindo. Me gusta y hace lo que le digo…a diferencia de ti Douglas —Señaló Yoongi a Douglas, moviendo el dedo hacia él―. Te he preguntado por los que hicieron estos planes y no has hecho nada más que mentirme. ¿Vas a dejar que un humano sea más honorable que tú, un hombre lobo y miembro honorable de mi manada?.

 

A pesar de que sus palabras eran un montón de basura, Yoongi tenía la satisfacción de ver el rostro de Douglas, palidecer.

 

―Había pensado mejor de ti, Douglas.

 

―Oh, Alfa Yoongi, mis más sinceras disculpas. Yo no entendía cómo eran las cosas. Si hubiera sabido cómo realmente se sentía, sin duda no habría ocultado ninguna información de usted― Douglas respondió rápidamente.

 

―Dice la verdad― declaró Jungkook de nuevo.

 

―¿Tiene que seguir haciendo eso? —preguntó Douglas. —Es muy extraño. Le prometo que no voy a mentir otra vez, Alfa.

 

―Dice la verdad.

 

Yoongi asintió con la cabeza a Jungkook, quien liberó a Douglas y retrocedió.

 

―Si bien acepto tus disculpas, Douglas, tengo que decirte lo decepcionado que estoy contigo y los demás implicados en este plan de acoplarme con Wendy. No por el plan, sino debido a no discutirlo conmigo. ¿Cómo voy a dirigir con eficacia esta manada cuando los que me rodean hacen planes sin mi conocimiento?

 

―Esa no era nuestra intención, Alfa, se lo juro. Estos planes estaban en vigor mucho antes de que se convirtiera en Alfa aquí. Estábamos a la espera de ver qué tipo de hombre era antes de que habláramos de ellos con usted.

 

―¿Y ahora?

 

―Bueno, yo no creo que pueda hablar por los demás, pero si usted es serio sobre la consideración de gobernar con Wendy a su lado, yo creo que sería mejor contar con su apoyo en estos planes. ―dijo Douglas.

 

―Entonces dime, ¿Cuales son exactamente estos proyectos y cómo me implican a mí? ―preguntó Yoongi, tratando de no dejarle saber que ya lo sabía. No serviría de nada el mostrar su mano a Douglas antes de tiempo.

Observó a Douglas dar un vistazo a la habitación a los otros hombres y de vuelta a él.

 

―¿Está seguro de que está bien hablar delante de ellos?

 

―Confío en estos hombres con mi vida, Douglas. Si ellos no lo oyen ahora, una vez que te vayas yo hablaré con ellos. Puedes ahorrarme la mitad del tiempo si lo sueltas todo ahora.

 

―Muy bien―, dijo Douglas. Yoongi podía decir que no le gustaba la idea.

 

―Hicimos estos planes antes de que se convirtiera en Alfa, con nuestro antiguo Alfa. Originalmente él iba a acoplarse con Wendy, no tú.

 

―¿Ella era su compañera?        

 

―Oh, no, pero necesitaba aparearse con ella. Todo depende de eso.

 

Voy a apostar a que es así, pensó Yoongi.

 

―Entonces, ¿de qué se trata?

 

―Se  supone  que  nuestro  Alfa,  usted  en  este  caso,  se  apareará  con Wendy  y  gobernarán  nuestra  manada  juntos.  Este  acuerdo  solo  se consolidará una vez que ella haya dado a luz al primero de sus cachorros.

 

―¿Y  el  acuerdo?― preguntó Yoongi. Fue difícil dejar  de apretar  los dientes. Él le había preguntado por el plan tantas veces, que se sentía como una peonza. Sólo deseaba que Douglas siguiera adelante con ello y le explicara el maldito plan.                    

 

―Wendy es parte chupasangre. ―¡Por supuesto!         

 

―¿Ah,  sí? Y  parte  mujer  lobo,  supongo. A  menos  que…ella  no  será humana, ¿verdad? ―preguntó Yoongi, sonando muy disgustado.

 

―Oh no, no. Ella es medio chupasangre y medio mujer lobo. Hicimos un trato con su aquelarre para proporcionarles sangre de lobo a cambio de dinero y el territorio de nuestra manada― dijo Douglas rápidamente.

 

―¿Sangre  de  hombre lobo?  —preguntó Yoongi, tratando  de  parecer curioso en vez de vomitar.                       

―Es un afrodisíaco para las sanguijuelas. Ellos adoran esas cosas, incluso más  que  la  sangre  humana. Si les  proporcionamos un suministro  constante de sangre de hombre lobo, nos van a pagar en oro, el oro suficiente como para comprar todas las zonas circundantes para añadirlas a nuestro terreno de caza.

 

―¿Y cómo hacemos para suministrarles la sangre de hombre lobo?

 

―Un programa de cría.

Esta vez Yoongi se sorprendió.

 

―¿Un qué?

 

―Un programa  de  cría. Es  muy  sencillo,  de  verdad. Un hombre  lobo adulto puede suministrarle sangre a cinco sanguijuelas hasta por un año si se usa correctamente. Si empezamos un programa de cría, agregamos miembros aquí y allá para la manada y podremos producir un promedio de cinco a diez donantes  de  sangre  cada  año.  Ellos  podrían alimentar hasta cincuenta  de ellos al año.                        

 

―Eso es un montón de donantes de sangre, pero ¿cómo se supone que los suministramos mientras esperamos a que el programa de cría madure? No es como si pudiéramos hacer crecer a los donantes durante la noche ―comentó Yoongi, tratando de no mostrar su disgusto con la idea.

 

―Ahí es donde nuestro antiguo Alfa lo estropeó. Él estaba tratando de encontrar seres humanos para suministrarlos, mientras que tratábamos de poner el programa de cría en marcha. Aparte de eso, él estaba usando nuestros propios miembros, pero los usamos demasiado rápido.

 

―Es por eso que ya no tenemos 300 miembros. ―dijo Jimin en voz baja.

 

Douglas se volvió hacia él, asintiendo con la cabeza.

 

―Sí, es cierto, pero él nunca tocó a los miembros principales, usted me entiende. Nuestras familias están fuera del alcance de los chupasangres. Eso fue parte de nuestro trato con ellos.

 

―¿Los miembros principales?

 

―Aquellos de nosotros a los que se les ocurrió el plan. No tienen que participar en el plan, ninguno de los miembros de nuestras familias. Originalmente, ese era el plan del Alfa, pero él necesitó nuestra ayuda. No era algo que pudiera hacer por su cuenta, como usted puede ver. ―explicó Douglas.

 

―¿Quiénes son los miembros principales entonces? Si voy a apoyar este plan, no puedo tener a cualquiera en mi círculo íntimo, Douglas. ―dijo Yoongi en silencio, con la esperanza de averiguar finalmente la identidad de los miembros de la manada que habían ideado esta idea repugnante.

 

―Bueno, la mayor parte de ellos son los que usted ha conocido en los tres meses que ha estado como Alfa aquí. Otros querían primero tener una idea sobre como era usted antes de conocerle. También está mi familia, por supuesto, y la familia de mi hermano. Básicamente, además de nosotros, están las cinco familias fundadoras de esta manada.

 

―Pero eso es la mitad de la manada, Douglas― dijo Yoongi, de forma rápida luego de hacer las cuentas en su cabeza.

 

―En realidad, es cerca de veinte miembros en total, que es por eso que necesitamos tanto este programa de cría. Nuestras familias están fuera de los límites. Casi hemos acabado con los donantes ―dijo Douglas, volviéndose a mirar a Hoseok, que aún estaba de pie detrás de él. ―A menos que, por supuesto, le gustara entrar en esto. ¿Cuántos miembros tienen en su manada?

 

―Los suficientes para comenzar las cosas hasta que esté el programa de cría en marcha, pero tendría que hablar de esto con mi Alfa antes de poder darle el visto bueno. Querrá saber lo que hay para él. Mientras tanto, yo le podría dar algunos nombres para empezar. Hay algunos miembros de nuestra manada, que no me importaría ver desaparecer. ―dijo Hoseok.

 

―¿Y los demás miembros de la manada? ¿Qué pasa con ellos? ―preguntó Jimin.

 

―Ellos no saben nada acerca de esto, y prefiero que siga siendo así. Entre menos gente lo sepa, con menos gente tendremos que compartir —dijo Douglas al volverse para mirar a Jimin.

 

―Entonces, ¿cómo funciona esto exactamente? ¿Los invitas a cenar y nunca acaban de irse a casa o qué?

 

―Algo así ―resopló Douglas ―. En realidad, nuestro viejo Alfa tenía un plan. Estaba empezando a ponerlo en marcha cuando fue desafiado. Cada familia tenía que presentar a su hijo a un ritual secreto para ser plenamente aceptado en la manada en su decimo octavo cumpleaños. Si la sangre era lo suficientemente buena, era tomado y a sus familias se les decía que no fueron aceptados en la manada por lo que fueron expulsados.

 

―¿Y si su sangre no era lo suficientemente buena?

 

―Ellos los mandaban de vuelta a sus familias, para cachorros en el programa de cría. El Alfa también redujo la edad de apareamiento para que pudiéramos comenzar el programa de cría lo más rápido posible.

 

―¿Y estás seguro de que nadie más lo sabe excepto las familias principales? Si estoy de acuerdo con este plan, no quiero compartir ―dijo Yoongi. Y también estaba ese pequeño detalle de estar totalmente asqueado con todo el asunto.

 

Yoongi no podía creer el descaro de estas personas. ¿Acaso realmente ellos creían que podían vender a los miembros de una manada entera y nadie lo sabría?

 

―Oh, no, Alfa, estoy seguro de que nadie, excepto los miembros principales lo saben. Esto tuvo que permanecer en secreto. Si esto saliera a la luz, nunca tendríamos a ningún donante de sangre.

 

Yoongi asintió con la cabeza como si entendiera, que así no funcionaría. Todo el plan era una auténtica pesadilla. No podía creer que nadie hoy en día, incluso los hombres lobo, vinieran con un plan tan vil como este.

 

―Tengo una última pregunta, Douglas. ¿Qué tiene que ver este plan con mi acoplamiento con Wendy? ¿Por qué es tan importante para ella gobernar a mi lado? ¿No podemos poner en práctica el programa de cría sin ella?

 

―Usted sabe, yo también me preguntaba eso, pero me dijo Timmins que el hermano de Wendy es el líder de su aquelarre. Él insistió en que Wendy fuera incluida en la oferta. Él quiere a alguien de su entera confianza a cargo de las cosas aquí.

 

Yoongi se quedó callado por unos momentos, mientras él comprendía las palabras de Douglas. Finalmente, él asintió con la cabeza mientras levantaba a Taehyung colocándolo sobre sus pies y se levantó.

 

―Tengo que hablar de esto con mis amigos, Douglas. Me gustaría que te quedaras aquí con Jimin, mientras que salimos por un momento.

 

Douglas asintió con la cabeza. Yoongi podría decir por la expresión ansiosa en su rostro que él realmente pensaba que había llevado a su Alfa a pensar de la misma forma que él. Yoongi negó con la cabeza mientras sujetaba a Taehyung por el brazo y lo sacaba del estudio.

 

Todos, excepto Douglas y Jimin salieron fuera. Yoongi cerró la puerta y atrajo a Taehyung a sus brazos, hundiendo el rostro en su cabello. Se quedó allí durante varios momentos en silencio, mientras sostenía a Taehyung.

 

―Te quiero tanto, bebé, y siento tanto haber tenido que decir aquellas cosas. ―susurró él en el pelo de Taehyung.

 

Taehyung envolvió sus brazos alrededor de la cintura de Yoongi y apoyó la cabeza contra su pecho, abrazándolo de nuevo.

 

―Mascota, mi culo― se rió nerviosamente. —Creo que prefiero ser tu niño juguete.

 

―Tanto tiempo como seas mío.

 

―Siempre.