CAPITULO 14

—¿Tú eres mi padre?

 

Seojoon asintió.

 

—Mi esposa estaba embarazada de ti cuando fue secuestrada.

 

—Pero, pensé... —Yoongi frunció el ceño—. ¿Philip no es mi padre?

 

—No. —Seojoon negó con la cabeza—. Si los hubieran mantenido a todos en el mismo lugar, les habría pedido a las otras manadas que me ayudaran a rescatarte, pero Philip te estaba criando como su propio hijo. Sabía dónde mantenían a Summer y Flynn, pero Min seguía manteniéndote a su alrededor y en movimiento. Nunca pude obtener una pista de dónde estabas exactamente.

 

—¿Qué pasa con nuestra madrastra? —gruñó Jungkook—. ¿Cómo entró ella en el cuadro?

 

—¡Ella no es tu madrastra! —espetó Seojoon—. Yo nunca traicionaría a tu madre así. Sophia trabaja para  Min Philip. Ella fue enviada para mantenerme en línea. Mientras estuviera de acuerdo en tenerla allí y hacer lo que ella dijera, me dejarían ver a tu madre una vez al mes.

 

La boca de Jungkook cayó.

 

—¿Te dejan verla?

 

—Cada mes en luna llena, me permiten estar tres días con tu madre.

 

—Ahí es donde ibas cada mes —susurró Wondin—. Pensábamos que…

 

—Yo sé lo que pensaban —espetó Seojoon—. Pensaban que era un borracho que no se preocupaba por su familia.

 

—Papá, nosotros…

 

Seojoon hizo un ademán desdeñoso a sus hijos.

 

—Lo sé, les di esa impresión, y lo siento. Era la única manera. Si hacía lo que ellos me decían, me prometieron que no se llevarían a ninguno de mis hijos. Me permitían ver a su madre. —Seojoon tragó saliva, sus ojos se volvieron a llenar de lágrimas—. Ellos dejaron que su madre se quedara con Tereza.

 

—¿Tereza?

 

—Su hermana.

 

—¿Tenemos una hermana? —preguntó Wondin.

 

—Ella fue concebida en sus instalaciones en una de mis visitas. Ella acaba de celebrar su décimo cumpleaños. Ellos prometieron que dejarían que tu madre se quedara con ella y no experimentarían con ella, pero sospecho que ellos están esperando a que llegue a la pubertad y cambie.

 

—Yo no cambié hasta hace unos días —dijo Yoongi—. Tal vez ella será como yo y no cambie.

 

—Ella ya está mostrando signos del cambio, Yoongi. Me imagino que tenemos unos cuantos meses más, como mucho, antes de que llegue a la pubertad, y entonces todo puede pasar. Una vez que tengan un cambiaforma hembra no acoplada en sus manos no se sabe lo que van a hacer con ella.

 

—¿Por qué  están haciendo  esto?  —preguntó Yoongi—. ¿Por qué necesitan un cambiaforma femenino no acoplada? ¿Tu esposa no es suficiente?

 

—Summer está acoplada conmigo, lo que significa que ella no puede aparearse con nadie más. Tereza no tiene un compañero. Su composición genética es diferente a la de una hembra con pareja.

 

—¿Y con qué propósito?

 

—Quieren crear la combinación perfecta de genética y poder mental con el objetivo de crear una máquina asesina totalmente controlada por ellos. Podrían vender sus servicios al mejor postor, al gobierno, a otros gobiernos, empresas privadas, millonarios, etc. Podrían hacer millones.

 

—¿Vender sus servicios? —Jin soltó un bufido—. Suenan como El Profesor.

 

—¿El Profesor? —Seojoon parecía confundido.

 

—El Profesor se hizo mi guardián después de que mi madre murió. Usó a gente como yo para ganar dinero, mucho dinero. Tengo ciertas habilidades que me hacen muy popular entre los clientes del Profesor. El Profesor vendió mis servicios al mejor postor, a agencias gubernamentales, empresarios, narcotraficantes, nombrarlos, y vendió nuestros servicios a ellos. Es así como ganó tanto poder.

 

—¿Y él hizo dinero con eso?

 

Jin asintió.

 

—Hizo un montón de dinero. Yo personalmente hice una gran cantidad de dinero para él, algo de eso se suponía que sería mío. Dijo que estaba invirtiendo mi porcentaje por mí, pero creo que sólo seguía llenándose  los bolsillos con él. Sé que nunca vi nada de eso.

 

Yoongi frunció el ceño ante la inclinación en la ceja de Tae.

 

—¿Qué?

 

—¿Hay alguien aparte de mí que ve una conexión aquí?

 

—¿Qué conexión?

 

—El Profesor hizo millones vendiendo los servicios de Jin y sus amigos. Invirtió gran parte de ese dinero, el dinero que se suponía iba a ir a ellos. Min Philip posee una de las mayores empresas de inversión en el área, infiernos, tal vez del país entero. Y sabemos a ciencia cierta que Min tiene muchos negocios turbios andando. ¿Podrían El Profesor y Philip haber estado trabajando juntos?

 

Yoongi se dio cuenta de que no había estado presente durante el tiempo en que todo el mundo lidió con El Profesor, pero el silencio que llenaba la habitación ante las palabras  de Tae envió escalofríos corriendo arriba y abajo de su columna vertebral. No quería creer que el hombre que él pensaba era su padre podía ser tan malo, pero estaba empezando a parecer que no tenía otra opción.

 

Min Philip estaba involucrado en algunas cosas bastante sombrías, pero aun así Yoongi no estaba seguro de que ellos habían llegado al fondo de la letrina en la que estaba involucrado el hombre. Yoongi sólo sabía que de repente no quería estar conectado a Philip de ninguna manera, tipo o forma.

 

—¿Tae?

 

—¿Sí, lindo bebé?

 

—Esta cosa del acoplamiento, es para toda la vida, ¿no?

 

—Por supuesto, pensé que entendías eso. —Yoongi presionó su cabeza contra el hombro de Tae cuando los brazos del hombre se apretaron alrededor de él—. Esto es para la eternidad, Yoongi.

 

—Entonces, ¿puedo tomar tu apellido? No quiero ser un Min nunca más.

 

Tae se calmó.

 

—¿Quieres tomar mi apellido?

 

Yoongi se encogió de hombros, temeroso repentinamente de que Tae le dijera que no. Ellos podían estar acoplados, pero no era como si estuvieran casados ni nada así. Yoongi no sabía cómo funcionaba esto. Tal vez Tae no quería ese tipo de compromiso.

 

—¿No preferirías cambiar tú apellido a Jeon?

 

—Prefiero tener tu apellido.

 

Los brazos de Tae se tensaron aún más, hasta que Yoongi apenas podía respirar.

 

—Tae —jadeó—. No puedo respirar.

 

—Mi padre es el alcalde de la ciudad. Apuesto a que puede apresurar los papeles para nosotros —dijo Tae mientras aflojaba un poco los brazos y luego le dio un pequeño beso en la parte superior de la cabeza de Yoongi—. Kim Yoongi suena bien.

 

—Gracias, Tae —susurró Yoongi en silencio, acariciando su cabeza contra el hombro de Tae.

 

—Gracias, lindo bebé.

 

—¡Maldición! —exclamó Namjoon, llamando la atención de Yoongi de nuevo a la conversación—. ¿Sabes lo que estás diciendo, Tae?

 

—Es sólo una idea. Imagino que con Min Philip hasta las rodillas en esto, y siendo dueño de una empresa de inversión, tal vez él conocía o estaba involucrado con El Profesor. Sencillamente tiene un poco de sentido para mí.

 

—Eso significa que Jin y todos los otros estudiantes que El Profesor tenía no están seguros. Philip  podría saber exactamente dónde se encuentran cada uno de ellos. — La cara de Namjoon palideció—. Y si él lo sabe…

 

—Entonces puede intentar llevarlos de regreso — finalizó Tae por su hermano.

 

—Joder, tenemos que llamar a Reece y hacerle saber —dijo Jungkook.

 

—Tengo que llamar a Taylor y Justin, asegurarme de que sigan a salvo.

 

—Envíalos con Hiroto —dijo Jungkook—. Si alguien puede mantenerlos a salvo mientras lidiamos con esta situación, es su maldito aquelarre.

 

Wondin asintió mientras se ponía de pie. Ya estaba marcando su teléfono celular mientras caminaba hacia la cocina. Yoongi miró alrededor de la habitación, tratando de averiguar qué demonios estaba pasando porque él no tenía ni idea.

 

—Tae, qué…

 

—Cuando Jin llegó a nosotros, lo rescatamos y a un montón de otros chicos de este hombre al que ellos llamaban El Profesor —explicó Tae—. Los mantenía en cautiverio, obligándolos a hacer lo que él quería. Los tuvo por años. Namjoon mató al Profesor cuando el hombre vino por Jin.

 

—Y si Min Philip estaba involucrado con El Profesor —continuó Jungkook—, entonces todos los hombres que rescatamos podría estar en peligro.

 

—Entonces, ¿por qué simplemente no lo detenemos? —preguntó Yoongi.

 

—No es tan simple, Yoongi —dijo Seojoon—. Ellos tienen a Summer y a nuestra hija. Sophia todavía está en la casa esperando que regresemos. Si yo no hubiera visto a los chicos irse con Flynn y escondido su coche, nunca habría podido ser capaz de irme. Tal como estamos, Sophia va a estar enojada cuando descubra que Flynn se ha ido. Ella piensa que él es su última oportunidad.

 

—¿La última oportunidad de qué? —Yoongi estaba más confundido con cada minuto.

 

—Wondin, Hiroto, y Jungkook han encontrado sus parejas, compañeros masculinos. Flynn no está acoplado. Hay una posibilidad del cincuenta por ciento de que su pareja sea una mujer, por lo tanto, puede producir más sujetos para sus jefes. Es la misma razón por la que quieren mantener a Summer y Tereza en sus garras.

 

—No lo entiendo —dijo Yoongi—. Acabo de encontrar a Tae hace unos días. Si soy un cambiaforma, entonces ¿por qué no me mantuvieron encerrado como a todos los demás?

 

—Porque nunca cambiaste, Yoongi.

 

Yoongi miró a Tae.

 

—¿Era defectuoso?

 

—Tú, lindo bebé —dijo Tae mientras golpeaba con el dedo la punta de la nariz de Yoongi—, eres perfecto.

 

Yoongi sintió a su rostro enrojecer de placer al oír las palabras de Tae y lo enterró en la camisa del hombre. Podía oír la suave risa de los que lo rodeaban y supuso que su vergüenza había valido la pena si disminuía la tensión en la sala.

 

—Recuerda, hablamos de esto, Yoongi. Creo que tu lobo sabía que algo andaba mal y se negó a permitir el cambio. Era la forma del lobo de protegerlos a ambos. Es por eso que estuviste tan enfermo cuando tenías quince años.

 

—¿Estuviste enfermo? —Seojoon preguntó—. Nunca me enteré de eso.

 

—¿Cómo lo harías? —preguntó Yoongi.

 

—Tu madre se mantuvo informada de tu desarrollo. —Seojoon hizo una mueca—. Cuando te traían para tus chequeos mensuales, te ponían a dormir, permitiéndole a tu madre y hermana verte por unos minutos. Tu madre vive por esos minutos.

 

—Ellos me dijeron que estaba muerta.

 

Seojoon negó con la cabeza.

 

—No, ella no estaba muerta. Sólo la mantienen bajo estrecha vigilancia. A ella y a Tereza las mueven mucho, de lugar en lugar. Nunca sé exactamente en dónde van a estar hasta que Sophia me lo dice.

 

—¿Pero ellas son llevadas para verme cuando tengo mis exámenes mensuales?

 

Seojoon asintió.

 

—Sí.

 

—Entonces sé exactamente en dónde van a estar la próxima semana.

 

—¿Cómo?

 

Seojoon, y todos los demás, parecían tan interesados que Yoongi no pudo evitar sonreír.

 

—Porque sé dónde yo voy a estar.

 

—Yoongi, no estoy seguro que me guste esta idea.

 

Yoongi miró por encima del hombro a su compañero mientras enjuagaba el último de los platos de la cena. No estaba para nada sorprendido de ver los brazos de Tae cruzados sobre el pecho o el pequeño resplandor en los ojos del hombre. Yoongi suspiró profundamente mientras caminaba para apoyarse en él.

 

—A mí tampoco me gusta, pero ¿vez alguna otra manera de hacer esto?

 

—¿Tienes que ser tú?

 

—Sí. —Yoongi se rio entre dientes—. No creo que podamos escaparnos con otra persona entrando a escondidas. Los médicos conocen mi cara.

 

—Todavía no me gusta —se quejó Tae—. Es como enviarte de nuevo a la guarida del león.

 

—Tae…

 

—Yoongi, ¿y si algo sale mal?

 

—Nada va a salir mal.

 

—¡No puedes saber eso! —espetó Tae—. Cualquier cosa puede suceder, y si Philip pone sus manos sobre ti otra vez, no sabemos lo que él puede hacer. Puede que nunca te vuelva a ver.

 

—Tae. —Yoongi agarró un puñado de la camisa de Tae y le dio a su compañero una pequeña sacudida—. Tienes que parar esto. Te necesito a mi lado en estos momentos. Estoy lo suficientemente asustado por los dos.

 

La cabeza Tae cayó hacia atrás. Yoongi no sabía si tenía los ojos cerrados o si estaba contando las tejas del techo, pero podía sentir la tensión en el duro cuerpo presionado contra él. Yoongi se inclinó hacia adelante y apoyó la cabeza contra el pecho de Tae.

 

—Tengo que hacer esto, Tae, por favor entiende.

 

—Lo entiendo, Yoongi —dijo Tae mientras envolvía sus brazos alrededor de Yoongi—. Simplemente no me gusta. Si fuera a perderte...

 

—Eso nunca va a suceder —susurró Yoongi—, sin importar lo que pase. Yo siempre te perteneceré.

 

—Lo sé, lindo bebé. Simplemente no me gusta este plan. Te pone en demasiado peligro.

 

—Él tiene razón, Yoongi.

 

Yoongi se volvió para ver a Kim Dowoo parado en la puerta de la cocina.

 

—¿Tiene un plan mejor? Porque si lo tiene, me gustaría escucharlo.

 

—Vamos a ir y conseguir sacar a tu madre y hermana.

 

—No es suficiente. —Yoongi se volvió en los brazos de Tae y se recostó contra su compañero—. No podemos limitarnos a rescatar a mi madre y hermana. Incluso, tenemos que destruir todo lo que diga que los cambiaformas existen. No podemos dejar que continúe siendo una amenaza para nosotros.

 

—Estoy de acuerdo, pero ¿cómo planeas hacer eso? — preguntó Dowoo—. Tiene que haber más de un lugar en donde mantiene esta información. Corp Min tiene un montón de instalaciones de investigación diferentes. ¿Cómo podemos destruirlo todo?

 

—Tenemos suficiente gente —dijo Tae—. Si Yoongi pudiera darnos cada una de las locaciones entonces podríamos planear ataques simultáneos. Destruirlos todos de una vez.

 

—Tenemos que atacar la oficina de Philip al mismo tiempo, y tal vez la oficina de su casa. —A Yoongi le gusta mucho más esa idea de la que tenían antes—. Mantiene una gran cantidad de cosas en sus computadoras en el trabajo y hay una bóveda de discos en su oficina de la casa. Ahí es donde suelo ir para mis exámenes.

 

—Tendría que ser rápido y muy coordinado. —Dowoo se frotó la barbilla—. Pero podría ser posible. Wondin tiene unos amigos muy interesantes, y tenemos más de una persona en nuestra manada y en el aquelarre de Zacarius que podrían ser capaces de entrar donde otros no pudieron.

 

—Cualquier cosa es mejor que dejar que Yoongi fuera a su habitual cita mensual por sí mismo, incluso si pusiéramos un dispositivo de rastreo en él. No importaba cuán cerca estuvieran detrás de él siguiéndolo, siempre habría una posibilidad de que descubrieran el dispositivo de seguimiento y se llevaran a Yoongi.

 

—Entonces —dijo Yoongi—, formen un plan en conjunto y llamen a esos chicos. Tenemos cinco días hasta mi próxima cita. Eso debería darles tiempo de sobra para lograr algo, ¿no es así?

 

—Va a ser ajustado, pero creo que se puede hacer. — Dowoo sonrió—. Voy a comenzar a hacer llamadas telefónicas. Ustedes dos vayan a hablar con Wondin.

 

—¡Esperen!

 

—¿Tienes algo que agregar, Yoongi? —preguntó Dowoo.

 

—Hay un doctor, su nombre es Dr. Carter Zelo, no sé en qué centro va a estar, pero él es el médico que lleva mi caso. Es algo así como mí… —Yoongi hizo una mueca—. Él es la mano derecha de Philip. Él sabe todo lo que está pasando. Es posible que quieran descubrir lo que sabe.

 

—Vamos a mantener un ojo en él entonces.

 

Yoongi le dio una inclinación de cabeza a Dowoo, agradecido de que el Alfa lo estuviera escuchando y aceptando sus palabras como un hecho. El padre de Yoongi, borren eso... el captor de Yoongi nunca había hecho eso. La palabra de Philip era ley, y cualquier persona que  no aceptara su palabra pagaba el precio, por lo general de una manera muy dolorosa y humillante.

 

Yoongi todavía estaba tratando de procesar el hecho de que el hombre que creyó durante toda su vida era su padre, en realidad era el que lo mantenía apartado de su verdadera familia. Aunque no le gustaba casi nada de Philip, había una parte de él que sentía afecto por el hombre que él creía era su padre. Y no sabía cómo resignarse al hecho de que todo había sido una mentira.

 

—¿Tae? —Yoongi preguntó al salir de la cocina.

 

—¿Sí, Yoongi?

 

—¿Crees que soy ingenuo?

 

—¿Ingenuo? —Tae dejó de caminar para girar y mirar a Yoongi.

 

—Sí, ya sabes, ¿ingenuo, fácil de dirigir, aceptando todo? —Yoongi no podía pensar en otra manera de definir lo que estaba tratando de decir.

 

—No, lindo bebé, no eres ingenuo. Sólo tratas de ver lo bueno en todo el mundo, y eso no es algo malo. ¿Quién quiere ir por ahí toda su vida esperando que la gente tome ventaja de ellos? Creo que sería una apestosa forma de vivir.

 

—Pero si me hubiese cuestionado un poco más las cosas, tal vez…

 

—Yoongi, escúchame. —Yoongi no podía perderse la intensidad en los ojos de Tae cuando el bajó la mirada hacia él—. Min Philip ha engañado al mundo entero, no sólo a ti. Te dijo a una muy temprana edad que era tu padre. ¿Por qué deberías haber creído otra cosa? No tenías ninguna razón para dudarlo.

 

—Pero…

 

—Yoongi, esto no es tu culpa. Todo esto recae directamente sobre los hombros de Philip. Él hizo esto, no tú.

 

—Sí, pero…

 

—¡Yoongi!

 

Yoongi no pudo evitar reír ante la exasperación en la voz de Tae.

 

—Entonces, ¿no debería sentirme mal porque estoy muy feliz de que Philip no es mi padre?

 

—Estoy muy contento. —La sonrisa de Tae era encantadora, haciendo latir el corazón de Yoongi un poco más rápido—. Demonios, incluso puede que haga una fiesta para celebrarlo.

 

Yoongi acarició con el dedo el tatuaje tribal en el bíceps derecho de Tae.

 

—¿Me dejarías hacerme un tatuaje como el tuyo?

 

—Yoongi, no necesitas mi permiso para hacerte un tatuaje. Eres un adulto. Tienes que tomar tus decisiones. Si quieres un tatuaje, consigues un tatuaje.

 

—Sí, pero ¿cómo te sentirías al respecto?

 

—Creo que sería sexi como el infierno, lindo bebé. —La risa de Tae era profunda y sexi, haciendo retumbar su pecho y curvar los dedos de los pies de Yoongi—. Tal vez me haga otro también, uno que diga “lindo bebé” justo sobre mi corazón, para que todos sepan que eres mío.

 

Yoongi frunció el ceño.

 

—Si quieres que todos sepan que soy tuyo, ¿no sería más lógico conseguir tu nombre tatuado en mí?

 

El aliento de Yoongi quedó atrapado en su garganta cuando los labios de Tae comenzaron a inclinarse hacia arriba. Parecía que Yoongi le acababa de ofrecer las joyas de la corona a Tae. Mordisqueó el dedo que Tae frotaba sobre sus labios, arqueó una ceja cuando Tae inhaló hondo.

 

—¿Harías eso por mí? —susurró Tae.

 

—Haría cualquier cosa por ti. —Yoongi sonrió—. Eres mi compañero.