Tae miró atentamente a Yoongi cuando asimiló sus palabras. En las pocas horas en las que Tae había conocido al hombre, había sido capaz de ver las emociones de Yoongi en su rostro, cada matiz. Esta vez, Tae no pudo y eso lo preocupaba. Yoongi se limitó a mirarlo.
—¿Yoongi?
—¿Eso
significa que te gusto?
—Uh, sí,
lindo bebé. —Tae frunció el ceño, preguntándose si Yoongi realmente entendía de
lo que estaban hablando—. Me gustas mucho.
—¿Eso
quiere decir que a él también tengo que gustarle? —preguntó Yoongi, pasando a Tae
hasta donde estaba parado Dowoo.
Tae miró por encima del hombro, justo a tiempo para ver las
cejas de su padre alzarse de golpe y una expresión de sorpresa cubrir su
rostro. Tae se rio y negó con la cabeza mientras miraba de nuevo a Yoongi.
—No, a
él no tienes por qué gustarle, pero está obligado a aceptarte.
—¿Por
qué?
—Él
tiene que aceptarte porque eres mi compañero. Los compañeros son elegidos por
el destino, no por nosotros. No es algo en lo que tengamos opción, lindo bebé, simplemente
es algo que es así. Mi padre sabe eso y una vez que se recupere de la sorpresa,
él lo aceptará, y a ti.
—Eso no
me parece muy justo. Quiero decir, es como si estuvieras diciendo que tengo que
gustarle porque a ti te gusto y no estoy muy seguro de que eso sea justo para
tu padre. Quiero gustarle, pero no es necesario que yo le guste, aunque eso
sería lo más agradable de hacer, y creo que una vez que llegue a conocerme tal
vez le guste, pero…
—Yoongi,
suficiente. —Tae se rio—. No se requiere que a mi padre le gustes, pero tiene
que aceptarte. Esas son dos cosas diferentes, lindo bebé.
—¿Es
así? —Yoongi levantó sus manos y se impulsó de nuevo a la esquina del sofá.
Empezó a masticar en uno de sus dedos y Tae
se preguntó si era un gesto de nerviosismo—. ¿Es realmente diferente? Sé que en
el gran esquema de las cosas probablemente lo sea, ¿pero lo es realmente? ¿Te
imaginas cómo sería la recepción familiar si tu padre simplemente me acepta en
lugar de tomarse el tiempo para conocerme y tal vez gustarle?
—Yoongi…
—¿Y qué
pasa con el resto de tú familia? Conozco a tu hermano, el sheriff, no le gusto.
Él ya tomó una decisión. Lo pude ver cuando vino a arrestarte. No he conocido a
tu madre, pero si es algo parecida a tu hermano o tu padre, entonces estoy
bastante jodido aquí. ¿Cómo se supone que voy a hacer amistad con estas
personas si no les gusto?
—¡Yoongi!
—espetó Tae mientras se estiraba y cubría con la mano la boca del hombre. La
conversación iba en direcciones que Tae no podía controlar. Tenían que mantener
el rumbo, sobre todo porque Tae todavía no había dejado caer su bomba más
grande—. No importa si a mi familia le gustas o no, lindo bebé. Sólo importa
que a mí me gustes.
—¿Y te
gusto? —Yoongi preguntó mientras se alejaba.
—Muchísimo.
—Tae sonrió.
—Termínalo,
Taehyung.
Tae le disparó a su padre el brillo más malvado y se volvió
hacia Yoongi.
—Hay algo más que es un poco diferente en mi familia, Yoongi.
Un fuerte resoplido llenó la habitación. Tae deseaba que su
padre se fuera o fuera a la otra habitación para que él pudiera decirle a Yoongi
su secreto sin comentarios del hombre. Por su secreto podría perder a la
persona más importante de su vida, aunque Yoongi hubiese sido esa persona por
sólo unas pocas horas.
—No
quiero que te asustes, Yoongi —dijo con suavidad Tae mientras se ponía de pie y
luego empujaba la mesa a un lado de la habitación. Volvió para pararse frente a
Yoongi, rezando para que el hombre no escapara gritando de la habitación—. No
voy a hacerte daño, ¿de acuerdo?
Yoongi frunció el ceño.
—Está bien.
Tae se quitó la camisa y la dejó caer al suelo y luego
alcanzó los botones de sus jeans. Oyó una súbita y pequeña inhalación y miró a Yoongi
para encontrar sus ojos ampliamente abiertos mientras veía cada movimiento de Tae.
Su rostro se enrojeció mientras miraba más allá de Tae hasta donde estaba de
pie Dowoo, y luego de vuelta.
—Tae, tu
padre está aquí. ¿No deberíamos…?
—Sólo
mira, Yoongi. —Tae bajó los jeans por sus piernas y los pateó lejos, y luego
dejó que fluyera el cambio.
Sus huesos tronaron, sus músculos se estiraron mientras su
cuerpo cambiaba a la forma de cuatro patas de su lobo.
Una vez que el cambio estuvo completo, Tae agitó su cabeza y
luego la levantó para mirar a Yoongi. El hombre no movió ni un músculo, sólo
miraba. La expresión de su rostro no era una de horror, pero sí contenía
impresión y otra cosa que Tae no podía definir.
—Este es
nuestro secreto, Yoongi. —Tae volvió la cabeza para mirar a su padre caminar
para pararse a su lado. Por muy enfadado que estuviera con su padre por su
interferencia, Tae no pudo evitar inclinarse hacia la mano de Dowoo que
utilizaba para rascar detrás de sus orejas. Se sentía realmente bien—. Toda
nuestra familia es así, Yoongi. Bueno, de todos modos, la mayoría de ellos.
Tae se volvió para ver la reacción de Yoongi, pero no había
cambiado. Yoongi sólo siguió mirándolo fijamente. Estaba empezando a poner
nervioso a Tae. ¿Era su secreto demasiado para Yoongi? Tae dio un paso
vacilante hacia su compañero con la esperanza de que pudiese llenar el repentino
vacío que podía sentir entre ellos.
Yoongi de repente dio un salto y corrió a la cocina. Tae
miró a su padre mientras sentía que su corazón empezaba a romperse. ¿Yoongi lo
estaba rechazando? Él nació como un cambiaforma lobo. Había sido así desde el momento
en que respiró aire. No lo podía cambiar y no quería que eso fuera lo que le
costara su compañero.
—No todo
el mundo puede aceptar al lobo, Taehyung. Sabes eso. —El rostro de Dowoo
contenía tristeza y una pizca de remordimiento—. Lo siento, hijo.
Tae sintió su angustia comenzar a abrumarlo. Yoongi era su
compañero. Sin él, Tae iba a vivir una
existencia muy
solitaria. Nunca encontraría otro compañero, no a menos que Yoongi muriera, y
eso era inaceptable.
Decidido a arreglar las cosas entre él y Yoongi, Tae comenzó
a caminar hacia la cocina cuando Yoongi llegó derrapando alrededor de la
esquina. Tenía una botella de licor en una mano y tres vasos y un cuenco en la
otra.
Yoongi tropezó hasta detenerse cuando vio a Tae, su cara
estaba pálida. Tae se dejó caer al suelo y se quejó en voz baja, tratando de
mostrarle a Yoongi que no era un peligro. Yoongi no dijo nada por un momento,
sencillamente se quedó mirando un poco más y luego, lentamente, levantó los
elementos en su mano.
—Yo no
sé ustedes, pero me vendría bien un trago. Creo que los efectos del alcohol
desaparecieron en algún momento cuando tu hermano trató de arrestarte y yo no
creo que pueda enfrentar esta mierda sobrio, no ahora. Tal vez más tarde, después
de que me acostumbre a la idea de que lleves pelaje, pero ahora mismo, no,
necesito un trago.
La boca de Tae habría caído abierta en shock si estuviera en
forma humana. En cambio, inclinó la cabeza hacia un lado, sus orejas
revivieron. Yoongi no estaba escapando. ¿Sólo estaba consiguiendo un trago? No
estando seguro de qué pensar, Tae siguió a Yoongi de regreso a la sala de
estar.
Yoongi de nuevo estaba sentado en el sofá. Bajó la mirada a
la botella y las copas en su mano y luego se deslizó hasta sentarse en el
suelo, con la espalda apoyada contra el sofá. Puso los tres vasos en el suelo
junto al cuenco y vertió el líquido ámbar en cada uno.
Tae se sentó frente a Yoongi, no demasiado cerca ni
demasiado lejos. No quería asustar a Yoongi, pero mantenerse lejos del
hombre era casi más
de lo que Tae podía manejar. ¿Tal vez debería cambiar
de nuevo?
Yoongi le tendió una copa a Dowoo, quien la cogió y se sentó
en una silla junto al sofá, luego colocó otro vaso y el cuenco frente a Tae. Yoongi
cogió su vaso y se encogió de hombros cuando Tae lo miró.
—No
sabía si necesitabas un vaso o un cuenco. Quiero decir, si eres humano entonces
es un vaso, ¿verdad? Pero justo ahora no eres exactamente humano y por eso es
que supongo un cuenco sería lo mejor. —Yoongi frunció el ceño mientras le hizo
un gesto con la mano a Tae—. ¿Puedes beber en la forma en la que estás en este
momento? ¿O eso te afecta gravemente? Tal vez no deberías beber. —Yoongi otra
vez se encogió de hombros mientras se echaba a reír—. Creo que uno de nosotros
borracho es suficientemente, ¿eh?
Tae vio a Yoongi tomar un largo trago del líquido en el vaso
y luego miró a su padre. Dowoo sostenía su vaso con las dos manos, pero parecía
estar viendo a Yoongi en vez de beber.
—Yoongi,
si no te importa que pregunte, ¿por qué estás tomando esto tan bien? —preguntó Dowoo—.
En mi experiencia, en este momento la mayoría de la gente estaría corriendo por
sus vidas y sin embargo tú estás aquí sentado bebiendo con nosotros.
—Tae
dijo que no me haría daño.
—¿Y tú
le creíste?
—¿No
debería? ¿Estaba mintiendo?
Tae cayó al suelo y se arrastró más cerca de Yoongi,
lloriqueando un poco. No lastimaría a Yoongi por nada en el mundo. Quería que Yoongi
supiera eso.
—No, no
creo que Tae te hiciera daño.
—¿Pero?
—preguntó Yoongi—. Puedo escuchar el pero en su voz y siempre hay un pero.
Entonces, ¿qué es? ¿Qué es lo que no me está diciendo? Porque creo que necesito
saberlo todo.
—Taehyung
nació como cambiaforma al igual que yo, al igual que muchos en nuestra manada.
—Manada,
ahí está esa palabra otra vez. ¿Qué significa exactamente?
—Somos
como cualquier otra manada de lobos o una gran familia con una pequeña
excepción, podemos cambiar.
—¿Llama
a eso una pequeña excepción? —Yoongi se mofó—. Se convierten en lobos. Yo
llamaría a eso una excepción bastante grande. Tal vez me equivoque, pero a mí
me parece algo muy grande. Por supuesto, nunca antes me he topado con alguien
que puede cambiar, pero aun así, a mí me parece muy grande.
—¿Nuestra
capacidad de cambiar te molesta?
La boca de Yoongi se abrió y lentamente bajó la copa a su
regazo.
—¿Lo dice en serio?
—Absolutamente.
—Me
acaba de decir que todos en su familia pueden cambiar a lobos y ¿me está
preguntando si me molesta? — Yoongi se apoyó contra el cojín del sofá mientras
rodaba los ojos—. Creo que la palabra molestia sencillamente es demasiado poco
descriptiva para lo que estoy sintiendo en este momento. Sorprendido lo
cubriría mejor, tal vez incluso choqueado, pero si usted desea utilizar la
palabra molestar, ¿quién
soy yo para discutir con usted?
—Sí,
¿pero es lo suficiente chocante para rechazar que Taehyung te reclame?
Tae contuvo el aliento mientras esperaba la respuesta de Yoongi.
Las siguientes palabras que salieran de la boca de Yoongi podían fortalecerlo o
destruirlo. Taehyung trató de esperar lo mejor pero se preparó para lo peor. No
podía obligar a Yoongi a aceptarlo, no importaba lo mucho que lo quisiera.
—No
estoy seguro de entender exactamente lo que quiere decir con que Tae me
reclame. Sé que él dijo que los lobos se acoplan de por vida y que yo soy su
compañero. Entiendo eso. Sencillamente no entiendo exactamente qué es lo que
está preguntando.
—Si Tae
se acopla contigo, será para toda la vida, la tuya y la suya.
Yoongi se inclinó hacia delante para colocar el vaso en el
suelo, luego juntó las manos entre las rodillas. Su frente se arrugó mientras
le fruncía el ceño a Dowoo.
—Está bien, mire, no soy estúpido, pero parece que está
haciendo todo lo posible para hacerme sentir de esa manera. Entiendo que no le
guste y no quiere que esté con su hijo. No hay nada que pueda hacer para
cambiar eso. Por lo tanto, si quiere una respuesta honesta de mí, entonces
necesita darme más información para formar una opinión y dejar de andarse por
las putas ramas.
Tae parpadeó sorprendido. No recordaba haber oído nunca a
nadie hablarle a su padre de esa manera, ni siquiera su madre. También estaba
un poco sorprendido por la vehemencia que podía escuchar en la voz de Yoongi.
El hombre parecía que estaba empezando a enojarse. Tae sólo esperaba que su
padre no se molestara demasiado por las palabras de Yoongi.
—Si Taehyung
tiene sexo contigo y te muerde al mismo tiempo, se creará un vínculo entre
ustedes dos que sólo terminará cuando uno de ustedes esté muerto. Los lobos se
aparean de por vida y nosotros también, lo que significa que Taehyung nunca
estará con nadie excepto tú. Tú serás su compañero. Sin embargo, serás su
compañero humano, lo que en nuestra manada significa que él será el dominante
entre los dos.
Para gran asombro Tae, Yoongi se echó a reír.
—Oh, por favor, Tae es el dominante entre nosotros ahora.¿Cómo su
condición de lobo va a cambiar eso?
—Para
empezar, yo soy el Alfa de esta manada —dijo Dowoo—. Eso significa que soy el
mandamás y lo que yo digo se hace.
—¿Está
tratando de decirme que puede decidir si Tae y yo estamos juntos o no?
—No,
pero si alguna vez me hablas de la forma en que lo has hecho frente a otros
miembros de la manada, lo veré como un reto a mi posición de Alfa y lucharé
contigo. Y, Yoongi, un reto por el liderazgo es siempre hasta la muerte.
Tae esperó que Yoongi estuviera completamente asustado y
todo eso. Cualquier persona sensata lo estaría. En cambio, Yoongi inclinó la
cabeza hacia un lado como si ponderara las palabras de Dowoo. Ni siquiera
apartó los ojos de los de Dowoo, un movimiento que podría ser visto como un
desafío.
—Así
que, usted básicamente está diciendo que, como Alfa, usted tiene derecho a
tratarme como la mierda, pero ya que soy un humano, ¿no puedo decir nada al
respecto? Y si lo hago, ¿usted me va a matar? — Yoongi se agachó y tomó el vaso
del suelo y luego la botella de alcohol y se puso de pie. Inclinó el vaso hacia
Dowoo en un pequeño saludo—. Felicidades, Kim Dowoo, tú eres como mi padre.
Tae esperó hasta que Yoongi salió de la habitación antes de
cambiar de nuevo a su forma humana. Apretó los labios e ignoró a su padre
mientras subía bruscamente los pantalones por sus piernas y luego abrochó la
parte inferior dos botones.
No podía recordar la última vez en la que estuviera tan
cabreado, y él tenía problemas de ira. Inhalando una respiración profunda, Tae
se volvió para mirar a su padre.
—Creo que tienes que irte.
—Taehyung.
Tae levantó la mano para detener a su padre de decir lo que
fuera que el hombre sintiera la necesidad de decir. A Tae no le importaba. Lo
único que le importaba era llegar a Yoongi y convencer al hombre que él no era
como ninguno de sus padres.
—Has
dicho más que suficiente, papá.
—Taehyung,
necesitas entender…
—No, tú
necesitas entender —espetó Tae mientras daba un paso hacia su padre—. Yoongi es
mi compañero, mío. Tú no tienes el derecho de venir aquí y asustarlo o
amenazarlo. Ahora mismo, perfectamente estaría en mi derecho de desafiarte por
amenazar a mi compañero, y lo sabes.
—Taehyung,
si su padre…
—Esto no
es sobre el padre de Yoongi. Esto se trata de ti. Yoongi tiene razón.
Simplemente estás actuando de la manera que sigues diciendo que su padre actuaría.
—Tae pasó la mano por su cabeza calva mientras soltaba una risita—. No sé por
qué esperaba algo más de ti. Desde que me negué a convertirme en un ejecutor
como todos los demás en la familia, has minimizado cada decisión que he tomado.
—Eso no
es cierto, Taehyung.
—Es
cierto. —La mano de Tae se movió violentamente por el aire—. ¿Actuaste de esta
manera cuando Namjoon encontró a Jin y trajo al Profesor a nuestro valle, o
cuando Jimin conoció a Jungkook y de pronto anunció que era gay? No.
Sencillamente aceptaste sus decisiones y a sus compañeros. Ni siquiera le diste
a Yoongi una oportunidad.
—No se
trata de darle una oportunidad a Yoongi, Taehyung. Soy el Alfa de esta manada y
es mi deber protegerla. Min Philip es una gran amenaza para nosotros. Él podría
destruir esta manada. ¿Por qué no entiendes eso?
—¿Y por
qué no entiendes que esto no se trata de Min Philip? —gritó Tae—. Esto es sobre
Yoongi.
—Tae,
¿podrías llevarme de vuelta a mi coche?
Tae se dio media vuelta para ver a Yoongi de pie en el
umbral de la cocina. Su corazón se hundió cuando vio a Yoongi retorciendo las
manos. Sus ojos miraban al suelo, como si no tuviera el valor de mirarlo a la
cara. Él lucía... triste.
—Yoongi.
—¿Por
favor?
—Yoongi,
bebé, ¿no podemos hablar de esto? —Tae se apresuró para estar al lado de Yoongi.
El hombre se veía tan abatido y Tae no sabía cómo solucionarlo. Levantó la
barbilla de Yoongi, pero el hombre mantuvo los ojos abajo—. No hay nada que no
podamos resolver, lindo bebé, siempre que estemos juntos.
—No
puedo quedarme donde no me quieren, Tae — susurró Yoongi—. No sé lo que he
hecho que es tan malo, pero es obvio que tu familia no puede aceptarme y no
puedo quedarme aquí si sé que estoy abriendo una brecha entre tú y ellos.
Tae inhaló bruscamente. Yoongi iba a dejarlo. No podía
permitir que eso sucediera. El vínculo de apareamiento entre ellos ya se había
iniciado cuando mordió el cuello de Yoongi. No podía perder al hombre ahora.
—Está
bien, lindo bebé, sólo dame un momento para empacar una bolsa y nos podemos ir.
—Qu… no.
—Los ojos de Yoongi subieron de golpe mientras agarraba el brazo de Tae—. Tae,
tienes que quedarte aquí con tu familia. Los necesitas tanto como ellos te
necesitan.
Tae tomó la cara de Yoongi entre sus manos e inclinó la
cabeza del hombre hacia atrás.
—Te necesito más a ti, lindo bebé.
—Tae, no
puedo… —Yoongi negó con la cabeza—. No puedo interponerme entre tú y tu
familia.
—Yoongi,
esto no es una opción. —Tae trató de encontrar las palabras para explicarle a Yoongi
lo que el hombre significaba para él—. Incluso si hubiera una opción, yo aún te
escogería a ti.
Yoongi sencillamente lucía confundido, arrugando la frente y
arrastrando sus cejas juntas.
—¿Por qué? Quiero decir, sé que las cosas se pusieron muy
calientes entre nosotros, pero aquí estamos hablando de un compromiso de por
vida y apenas nos hemos conocido el uno al otro por unas horas. ¿Cómo puedes
estar tan seguro?
Tae sonrió. Él sabía cómo explicar eso.
—Porque todo en ti me llama, lindo bebé, la forma en que
hueles, tu sabor, infiernos, incluso la forma en que suenas al parlotear
incesantemente. Todo sobre ti me excita. Sólo verte sonreír me hace sentir
bien. Me hace sentir como si pudiera conquistar el mundo.
—Tae
—susurró Yoongi, sus ojos celestes eran enormes y redondos en su rostro pálido.
—No
quiero estar lejos de ti, incluso si sólo estás en otra habitación. Estaba
atraído por ti en el momento en que te vi, pero cuando Hoseok empezó a hablar
de ti, yo quería darle una paliza. Y entonces quería llevarte lejos y
protegerte del mundo. No iba a permitir que nadie hablase de mi lindo bebé de
esa manera.
El aliento de Yoongi pareció engancharse en su garganta
mientras inhalaba, casi como si estuviera tratando de no derrumbarse. Tae
todavía podía ver las lágrimas revistiendo las largas y oscuras pestañas del
hombre cuando Yoongi parpadeó hacia él.
—Está
bien.
—¿Está
bien? ¿Eso es todo? —Tae se rio entre dientes—. ¿Eso es todo lo que tienes que
decir, lindo bebé?
Yoongi asintió.
—¿Y qué
hay sobre cambiar a un lobo? —El corazón de Tae palpitó más rápido—. ¿Cómo te
sientes sobre eso?
Yoongi se encogió de hombros.
—Supongo que invertiré en polvo anti pulgas.
Tae miró boquiabierto a Yoongi por un momento antes de
envolver sus brazos alrededor del hombre y lo estrechó con fuerza entre sus
brazos. Enterró su rostro en el cabello de Yoongi y aspiró el acogedor olor de
su pareja.
—No te
arrepentirás de esto, Yoongi —susurró Tae. Cerró sus ojos cuando las lágrimas
brotaron de ellos, su corazón estaba abrumado por la voluntad de Yoongi de
aceptarlo en cualquier forma—. Lo prometo, lindo bebé. Haré todo lo que pueda
para hacerte feliz.
Tae sostuvo a Yoongi en sus brazos un momento más y luego se
inclinó hacia atrás para mirarlo hacia abajo, acunando un lado de la cara de Yoongi
con su mano.
—Sólo dame un minuto para coger algo de ropa y otras cosas y
seguiremos nuestro camino.
—Taehyung,
no te puedes ir.
Tae se dio la vuelta para mirar a su padre, asegurándose de
interponerse entre Dowoo y Yoongi.
—Puedo irme y eso es exactamente lo que planeo hacer. ¿No
puedes aceptar a Yoongi? Bien, esa es tu elección. Pero yo también tengo una
elección y elijo estar con Yoongi.
—Necesitas
una manada, Taehyung. No serás capaz de sobrevivir sin una.
—Yoongi
y yo haremos nuestra propia manada.
—Yoongi
no es un cambiaforma.
—No,
pero él es mi pareja.
Las manos de Dowoo cayeron a los lados, con una extraña
expresión surgiendo en su cara.
—Tú realmente hablas en serio. Dejarías a tu manada, a tu
familia, todo para estar con él.
—En un
latido del corazón.
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