domingo, 19 de junio de 2022

CAPITULO 6

Yoongi gruñó mientras estiraba sus brazos sobre su cabeza y movía los dedos de los pies. Se sentía mejor de lo que se había sentido en mucho tiempo. Había comenzado a ganar de nuevo el peso que había perdido y había estado comiendo alimentos sólidos por varios días. Los moretones en la piel incluso habían desaparecido. Estaba casi de vuelta a la normalidad. Sería capaz de salir a comer por su cuenta en cualquier momento.

 

Y lo mejor de todo, Taehyung estaba acurrucado junto a él.

 

En la mente de Yoongi no había nada mejor que esto. Todavía estaba un poco inseguro de a donde se dirigía su vida, pero estaba bastante seguro de que Taehyung estaría a su lado para cualquier cosa que se les presentara.

 

El hombre apenas había salido de su lado en los últimos días.

 

Si Taehyung no estaba empujando alimentos y sangre en la garganta de Yoongi, estaba haciendo que Yoongi durmiera, pero él estaba abrazado siempre al lado de Yoongi cuando despertaba. Eso hizo ser al obstinado hombre malditamente fácil.

 

Yoongi se volvió de lado y se acercó más a Taehyung. No tuvo que ir muy lejos. Yoongi había descubierto que a Taehyung le encantaba dormir acurrucado.

 

Si Yoongi no dormía apretado contra él, Taehyung lo perseguía a través de la cama mientras dormía. Yoongi tenía una especie de costumbre de tener a Taehyung pegado a su lado.   

Yoongi pasó los dedos sobre la cara de Taehyung, riendo en voz baja a sí mismo cuando Taehyung arrugó la nariz y trató de apartarla. Le encantaba  despertarse antes que  Taehyung  cuando tenía tiempo para recostarse ahí y mirar al hombre.             

 

Era una maravilla para Yoongi que Taehyung estuviera aún en la cama con él y mucho más aceptara la naturaleza más salvaje de Yoongi. Durante su recuperación en los últimos días, habían pasado mucho tiempo hablando sobre  su pasado y sobre  el futuro que esperaban tener. Por un lado Yoongi quería oír cada palabra que salía de la boca de Taehyung. Por otro lado, estaba aterrorizado de que fuera a perder lo que tenía con Taehyung. Le parecía todo demasiado perfecto y nada en la vida de Yoongi había ido alguna vez perfectamente.

 

El otro zapato caería pronto. Yoongi sólo esperaba que Taehyung todavía estuviera cerca cuando las cosas se calmaran. Pero no culparía al hombre si huía hacia las colinas. No todos los hombres estaban preparados para escuchar que su amante podía convertirse en una criatura de mito y necesitaba beber sangre para sobrevivir o la mierda que venía con esa vida.

 

Toda la cosa del enlace que había pasado entre ellos era algo totalmente diferente. Yoongi la sentía. ¿Cómo no iba a hacerlo? Estar lejos de Taehyung, incluso en habitaciones separadas, fue casi insoportable.

 

Sólo tocar la piel de Taehyung trajo a Yoongi más placer que el sexo que había tenido con nadie antes.

 

Yoongi no estaba seguro de que Taehyung sintiera lo mismo. Sabía que le gustaba a Taehyung e incluso se preocupaba por él en algún nivel. Sólo que no estaba seguro si Taehyung sentía el mismo tirón que Yoongi. Y tenía demasiado miedo de preguntar.

 

—Estás pensando demasiado duro.

 

Yoongi se sobresaltó, no sabía que Taehyung estaba despierto hasta que el hombre habló. Se rio suavemente sintiendo su rostro ruborizarse con su reacción.

 

—Estaba pensando en ti.

 

—Bueno, supongo que entonces está bien. —Los ojos de Taehyung lentamente se abrieron. El hombre dejó escapar un pequeño gemido mientras se estiraba y luego se acercó a Yoongi, con las manos sobre el ancho pecho de Yoongi—. Entonces, ¿qué estabas pensando sobre mí?

 

Yoongi  sonrió. 

 

—Estaba  pensando  en  lo  hermoso  que eres.

 

Las oscuras cejas de Taehyung se arquearon sobre su frente.

 

—Ah, ¿sí?

 

—Sí.

 

Yoongi  se  mordió el  labio  cuando las manos  de  Taehyung comenzaron   a   moverse   sobre   su   pecho,   acariciando suavemente su piel. Maldición, ¿habría sentido alguna vez algo tan bueno? Yoongi apretó la mandíbula cuando los dedos de Taehyung encontraron sus pezones y rápidamente se enteró de que sí, había otras cosas que se sentían igual de buenas o incluso mejor.             

—Taehyung.    

 

—¿Sí bebé?      

 

Yoongi frunció el ceño al mirar a Taehyung. Había demasiada diversión en la voz de Taehyung cuando Yoongi se sentía como que iba a explotar. No era justo.

 

—Estoy curado Taehyung.         

 

Los ojos de Taehyung parpadearon.

 

—¿Lo estás?     

               

—Lo estoy —Taehyung se había negado a llevar las cosas entre ellos más allá de besos y algunas caricias hasta que Yoongi estuviera curado. Yoongi incluso no había sido capaz de hablar con Taehyung sobre una mamada. Se sentía desesperado.   

 

—¿Estás seguro de que puedes manejarlo?       

 

—Sí, sí —jadeó Yoongi.

 

—¿Y si yo estuviera haciendo esto? —preguntó Taehyung justo antes de morder uno de los pezones de Yoongi.             

 

Yoongi gimió y se arqueó en el aire, una combinación de dolor y placer inundando su cuerpo.

 

—¡Oh si!             

 

—¿Crees que puedes manejar esto?

 

Los ojos de Yoongi se cerraron cuando los dientes de Taehyung rasparon sobre su pezón erecto y entonces el hombre comenzó a morder y chupar la pequeña protuberancia rígida. La piel de Yoongi hormigueaba, le dolía. Su pezón se endureció al instante bajo la suave caricia de Taehyung.

El simple contacto de los dedos de Taehyung hizo que un cálido estremecimiento corriera a través de Yoongi. El roce del muslo de Taehyung contra la cadera de Yoongi envió una sacudida a través de él. Envolvió sus brazos alrededor de los hombros de Taehyung y apretó al hombre más pequeño contra su parte superior.

 

—Taehyung —exclamó Yoongi con voz ronca cuando la parte inferior del  cuerpo del hombre  se  posó entre  sus piernas y sintió la dura polla de Taehyung presionando contra la suya. El fuerte peso del cuerpo de Taehyung volvía loco a Yoongi. Esta fue una de las pocas veces que se alegraba de ser un hombre tan grande. Podía acunar a Taehyung entre sus muslos y sostener al hombre.

 

—Me estás volviendo loco Taehyung.

 

La risa de Taehyung era malvada, pero sexy como el infierno. El aliento de Taehyung era cálido y húmedo contra la cara de Yoongi y hacía que su corazón corriera.

 

—¿Sí? —susurró Taehyung contra el pecho de Yoongi, creando una sensación de hormigueo en la boca del estómago de Yoongi.

 

Yoongi se mordió el labio para ahogar el grito de alegría cuando Taehyung  comenzó a  besar un camino más abajo en su cuerpo. Las manos de Taehyung quemaron el camino que trazaba    

sobre el abdomen y los muslos de Yoongi. Yoongi se rindió ansiosamente a la magistral seducción de Taehyung, dándose a sí mismo libremente para lo que el hombre quisiera hacerle.

 

Yoongi tomó la mano de Taehyung y la guió hacia abajo entre las piernas extendidas a su apretado hoyo. No soltó su manos hasta sentir una ligera  presión de  la  punta  de los dedos de Taehyung contra su tembloroso agujero.  

 

—¿Es esto lo que quieres, cariño?          

 

—Por favor —Yoongi no estaba muy lejos de mendigar en ese  momento.  Podía  sentir  los  dedos  de  Taehyung  presionando contra él sólo lo suficiente para hacer que su pulso saltara, pero no lo suficiente para empujarse en el interior de su adolorida entrada—. Por favor, señor.

 

—Ah, ahora, eso es lo que yo quería oír.

 

Yoongi gritó y se arqueó cuando los dedos de Taehyung se hundieron en su culo. Su aliento entrecortado en la garganta, un grito desesperado justo detrás de sus labios. Apenas podía respirar cuando la quemadura en su culo se transformó en placer que le hizo ver puntos blancos tras sus párpados.

 

Cuando los dedos de Taehyung rozaron su punto dulce, Yoongi siseó y se empujó de nuevo contra los dedos del hombre. Sus dedos se clavaron en la manta a cada lado de su cuerpo mientras buscaba el contacto de Taehyung.

 

—Tira de tus piernas hacia arriba Yoongi.

 

Yoongi jaló las piernas hasta su pecho lo más rápido que pudo  y  las  agarró  con  sus  manos.  No  le  importaba  que estuviera  básicamente,  en  exhibición.  Sólo  sabía  que  Taehyung estaba metiendo sus dedos dentro y fuera de su culo y pronto, esos dedos se sustituirían por la enorme polla de Taehyung. Infierno, Taehyung podía hacerle fotos si eso era lo que quería. A Yoongi no le importaba.             

 

—Tan  hermoso  —dijo Taehyung  mientras acariciaba  con  su mano libre hacia abajo del muslo de Yoongi y la unión de sus muslos. 

 

Yoongi gimió y se tensó cuando Taehyung empezó a masajear sus  bolas,  casi  perdiendo  el  dominio  sobre  sus  piernas.  Un gemido ansioso salió de sus labios. Empujó hacia fuera tratando de llevar los dedos de Taehyung más profundo.

 

—Sí —dijo en un gemido roto cuando Taehyung sacó los dedos y finalmente alineó su polla contra el orificio de Yoongi.

 

Taehyung siguió adelante, empujando lentamente su camino, estirando las paredes internas de Yoongi. Balanceándose hacia adelante y hacia atrás, comenzó a adentrarse en el cuerpo de Yoongi. Cada empuje estiraba más las paredes internas de Yoongi.

 

Taehyung bombeó su polla lentamente adentro y afuera, burlándose de Yoongi.

 

Yoongi no tenía ninguna conciencia de sí mismo más allá de la cama y de Taehyung encima de él. Se sentía abrumado por Taehyung y ambos se daban lo que necesitaban tan desesperadamente.

 

Los brazos de Yoongi rodearon el cuello de Taehyung, tirando de su cabeza hacia abajo. Sus bocas se estrellaron uniéndose de nuevo, más hambrientas y desesperadas que antes, amortiguando los sonidos de su placer.

 

Taehyung cubrió a Yoongi desde el muslo hasta el pecho con su cuerpo. Yoongi amaba el gran peso del cuerpo de Taehyung sobre el suyo y la longitud del rígido eje del hombre enterrado profundamente dentro de su cuerpo cuando Taehyung lo follaba lentamente y de manera constante.

 

Taehyung rozó sus labios a lo largo de la línea de la mandíbula de Yoongi.

 

—¿Eres mío Yoongi? —susurró al oído de Yoongi.

 

—Sí —susurró Yoongi en un gemido roto.

 

—Nadie más puede tenerte Yoongi. Sólo yo.

 

—¡Sí!

 

Los empujes sin esfuerzo de Taehyung tenían su longitud golpeando dentro y fuera del culo de Yoongi, moviéndose más duro, más rápido y más profundo. Yoongi gimió cuando la larga y gruesa polla que parecía llenarlo tan perfectamente rozó su próstata con cada golpe de las caderas de Taehyung.

 

Yoongi echó la cabeza hacia atrás, gimiendo largo y fuerte cuando el ángulo de Taehyung cambió y rozó el dulce punto de Yoongi una y otra vez. Su palpitante polla se balanceaba con cada embestida de las caderas de Taehyung, el aire frío barriendo alrededor de su calor, Yoongi provocándolo aún más.

 

El lamento roto de Yoongi cuando se corrió hizo eco alrededor de la habitación mientras rociaba cuerdas blancas de leche por todo el abdomen de Taehyung. Podía sentir que Taehyung aún latía en su interior mientras su liberación cubría a Taehyung y su propio estómago y muslos.

 

Yoongi escuchó el profundo gemido de placer de Taehyung y luego calor líquido llenó su cuerpo cuando Taehyung se corrió en su interior. Taehyung empujó un par de veces más, su cuerpo estremeciéndose, antes de alejarse y recostarlos a ambos sobre sus costados.

 

El corazón de Yoongi se calentó con la preocupación que pudo ver brillar en los ojos de Taehyung cuando el hombre se juntó contra su cuerpo, acunándolo como si fuera frágil y precioso, cuando en realidad, él era más grande que Taehyung. Yoongi sonrió cuando Taehyung se inclinó para besar su sien y luego metió la cabeza debajo de la barbilla de Taehyung.

 

—¿Era eso lo que estabas pensando bebé? —Yoongi se rio sin ganas.

 

—Eso funciona.

 

—Por desgracia para los dos y ya que estás lo suficientemente bien como para follar, estás lo suficientemente bien como para estar fuera esta noche en el salón.

 

Yoongi saltó cuando Taehyung le golpeó el culo. Inclinó la cabeza hacia atrás y frunció el ceño al hombre. Esta no era su idea de caricias post sexo.

 

—¿Por qué hiciste eso?

 

—Necesitas levantarte. Tenemos alrededor de una hora para tomar una ducha, vestirnos y luego conseguir que nuestros culos estén abajo antes de que se abran las puertas — Taehyung le dio un beso rápido al lado de la cabeza de Yoongi y luego rodó hasta el borde de la cama—. Namjoon y los chicos se supone que deben estar de vuelta esta noche y tú todavía tienes que jurarle fidelidad.

 

Yoongi gimió cuando se deslizó a un lado de la cama y se sentó. No quería levantarse e ir a trabajar. Quería quedarse en la cama abrazado a Taehyung.

 

—Esto apesta. —No le hizo gracia la risa de Taehyung. Le sacó la lengua al hombre y luego se levantó y se dirigió al baño. Un grito muy poco varonil salió de los labios de Yoongi cuando su culo fue agarrado por detrás.

 

—No saques tu lengua a menos que planees utilizarla Yoongi.

 

La mandíbula de Yoongi cayó mientras una descarga de corriente rodó a través de él.

 

—Acabamos de tener sexo. ¿Cómo puedes siquiera…? —Yoongi cerró la boca de golpe cuando sintió la tiesa polla de Taehyung empujar suave en su culo —. No importa.

 

—El vigor nunca ha sido un problema para mí cariño — Taehyung se rio y siguió a Yoongi a la ducha—. Incluso si sólo soy un humano.

 

Yoongi rodó los ojos y se giró para presionar su espalda contra la ducha. Deslizó sus brazos alrededor del cuello de Taehyung y apretó al hombre contra su cuerpo. Le dio a Taehyung un beso rápido en los labios y luego tomó el jabón. 

 

—¿Alguna vez te vas a alimentar de mí Yoongi?

 

Yoongi  dejó  caer  el  jabón  cuando  la  sorpresa  rodó  a través de él.

 

—¿Qué?            

 

—Ya me oíste —respondió Taehyung.  

 

—Pero... —Yoongi pasó la lengua por los labios mientras miraba  a  Taehyung.  Sus  ojos  se  posaron  en  el  pulso  que  latía rápidamente en la garganta de Taehyung. La alimentación era una cosa que no habían discutido a pesar de que Taehyung le trajo un vaso de sangre en varias ocasiones. Yoongi había imaginado que estaban fingiendo que simplemente eso no ocurrió.

 

Cuando Taehyung se giró hacia él, Yoongi vio la profunda determinación en los ojos del hombre. Pero también vio un atisbo de miedo. El corazón de Yoongi dio un vuelco.

 

—Puedo seguir bebiendo de una copa o salir antes del trabajo y… —Yoongi gritó cuando de repente fue empujado contra la pared de la ducha. Con todo lo que había pasado entre ellos, nunca había visto a Taehyung lucir tan enojado o ser tan violento. ¡Maldición! Sabía que debería haber mantenido la boca cerrada—. Taehyung, lo sien…

 

—No te vas alimentar de nadie más —espetó Taehyung, sus ojos color miel estaban oscurecidos por la furia—. No te alimentarás de nadie, excepto de mí. ¿Ha quedado perfectamente claro?

 

Yoongi tragó saliva.

 

—Sí señor.

 

—Lo digo en serio Yoongi. Si no quieres alimentarte de mí, entonces yo puedo seguir donando en una taza.      

 

La quijada de Yoongi cayó. Sabía que la sangre que había estado bebiendo  tenía  un  sabor extra  dulce,  pero  no había querido romper la calma preguntando de dónde venía.

 

 —¿Has estado donando sangre para mí?            

 

Las cejas de  Taehyung  se  fruncieron sobre su frente.

 

 —Por supuesto que sí. No necesitas ser alimentado por nadie más. Es mi derecho darte de comer.

 

Regocijo  como  nada  que  hubiera  sentido  inundó  a Yoongi, haciendo que sus rodillas se debilitaran. Agarró a Taehyung           y lo sostuvo cerca, enterrando su cara en la garganta de Taehyung.      

—Como nunca lo mencionaste, pensé que te desagradaba — susurró contra la húmeda piel de Taehyung—.No quiero hacer que te preocupes o…

 

—Bebé, no me desagrada.

 

Yoongi levantó la cabeza de mala gana cuando Taehyung le agarró la cara y tiró de él hacia arriba. No importaba lo que Taehyung le dijera, Yoongi no podía ver cómo el hombre no podía sentirse asqueado. Taehyung era humano. Yoongi no.

 

—Alimentarte es parte de lo que eres Yoongi y te dije que te aceptaba, colmillos y todo. Y lo hago.

 

Yoongi estaba confundido.

 

—Entonces por qué tu no…. — Bueno,  él  no estaba  seguro  de  querer  saber  por  qué  Taehyung nunca había dicho nada. La respuesta podría destruirlo.

 

—Yo estaba esperando que tú dijeras algo Yoongi.         

 

Oh.       

 

Yoongi agachó la  cabeza  cuando sintió que el  calor lo llenaba.

 

—¿No quieres alimentarte de mí Yoongi?           

 

Las  palabras  fueron  dichas con  tanta  vacilación que  la cabeza de Yoongi se levantó de golpe y miró con asombro a Taehyung.

 

—Se me ocurren muy pocas cosas que desee más.

 

Los ojos avellana de Taehyung comenzaron a arder. Yoongi sintió el  pene  del  hombre  endurecerse  y  golpear  contra  su muslo. Su aliento se quedó atrapado en su garganta cuando la comprensión le alcanzó. Taehyung estaba excitado por la idea de alimentarlo.

 

De repente Yoongi sintió que no podía respirar. Su cuerpo se llenó de excitación por la idea de alimentarse de Taehyung mientras el hombre lo jodía. Nunca se había alimentado durante el sexo antes. Se alimentó para su sustento, nada más. Pero la idea de alimentarse de Taehyung de una manera sexual de repente se sentía como que así se suponía que debía ser.

 

—Taehyung —gimió Yoongi, su mirada cayendo suavemente sobre el golpeteo en el cuello del hombre.

 

Taehyung sonrió.

 

—Sé lo que necesitas bebé.

 

 Fue  demasiado  para  Yoongi  cuando  la  mano  de  Taehyung serpenteó entre sus cuerpos mojados por el agua y envolvió su erecta polla bombeándola duro. El gemido de Yoongi se volvió profundo y necesitado. Taehyung dio a su engrosada carne un par de  tirones  largos  y  luego  Yoongi  sintió  la  polla  de  Taehyung deslizándose contra la suya mientras Taehyung envolvía las dos.     

 

Se aferró a los hombros de Taehyung y gimió. Taehyung tiró de la boca de Yoongi hacia abajo con los dedos envueltos alrededor de  la  línea  de  su mandíbula. Rozó sus labios contra  los de 

Yoongi.

 

—Aliméntate de mí Yoongi.       

 

Un  gemido  angustiado  salió  de  los  labios  de  Yoongi cuando entrelazó sus dedos en el cabello de Taehyung y echó la cabeza hacia atrás. Yoongi apretó a Taehyung contra su cuerpo, acunándolo como si fuera precioso porque para Yoongi lo era.   

               

Taehyung lo era todo.  

 

Acarició con su mano el cabello mojado de Taehyung y luego la pasó por su suave  mejilla  hasta  colocar su palma  contra  el pulso en la base de la garganta de Taehyung. Se inclinó y acarició el cuello  de  Taehyung,  lamiendo  y  mordiendo.  Aspiró  con  fuerza, tomando el olor embriagador en sus pulmones.            

 

Nada olía tan bien como Taehyung. Su boca rozó la línea de la garganta de Taehyung. Sintió que sus colmillos salieron cuando el hambre aumentó, la necesidad de  tomar lo que  era  suyo surgiendo a través de él. El  grito ronco  de  Taehyung  llenó la  habitación  mientras  los  colmillos  de Yoongi le atravesaban el cuerpo.       

 

Sintió el calor líquido chapoteando en su muslo y supo que Taehyung se había corrido tan solo con la mordedura. Era una sensación embriagadora saber que el tomar lo que necesitaba para sobrevivir le daba al hombre que amaba placer.

 

Yoongi apretó su boca sobre los pinchazos gemelos y lo chupó. Su boca se hizo agua ante el delicioso sabor cobrizo que salpicó a través de su lengua. Yoongi succionó, bebiendo con avidez. En respuesta, Taehyung inclinó la cabeza hacia atrás, ofreciendo más de su garganta a Yoongi.

 

Los dedos de Taehyung susurraron a través del cabello de Yoongi, acariciando suavemente mientras Yoongi aspiraba, bebiendo con avidez. Sus otros dedos nunca dudaron en acariciar la polla de Yoongi. El grito ronco de Yoongi llenó la habitación cuando la sangre que de buena gana le fue ofrecida se mezcló con el placer de la mano de Taehyung en su dura polla.

 

Chispas de deseo cruzaron por su visión cuando se vino. Su semen brotó sobre la mano de Taehyung mientras su cuerpo se hundió contra el hombre.

 

Cuando hubo tomado suficiente sangre, Yoongi lamió con su lengua la suave piel de Taehyung, cerrando los diminutos pinchazos que sus colmillos habían marcado. Su boca rozó la línea de la mandíbula de Taehyung antes de levantar la cabeza y mirar a los ojos avellana de Taehyung.

 

—Gracias.

 

Una sonrisa suavizó los labios de Taehyung.

 

—¿Con qué frecuencia necesitas comer?

 

—Estoy bien por unos pocos días.

 

Una de las esquinas de la boca de Taehyung se elevó en una pequeña sonrisa.

 

—Que mal.

 

—¿Realmente no te molesta? —Yoongi tenía que estar seguro.

 

Taehyung miró hacia abajo entre sus cuerpos donde Yoongi todavía podía sentir el calor de sus emisiones combinadas calentando su piel.

 

—No, no creo que molestar sea la palabra que yo usaría. Mamada mental funcionaría, sin embargo —Taehyung levantó los ojos, el deseo y la diversión mostrándose abiertamente en sus profundidades color avellana—. Tal vez la próxima vez podamos probar esto en la cama. Me encantaría tener mi polla en tu culo mientras tus colmillos están en mi garganta.

 

Yoongi gimió ante la imagen visual y se recostó contra la pared de la ducha.

 

—Taehyung —gimió mientras su polla empezaba a llenarse de nuevo.

 

La mera idea de la polla de Taehyung en su culo mientras se alimentaba del hombre fue suficiente para hacer que Yoongi considerara rogar.

 

—Hazme saber cuándo tienes hambre otra vez.

 

—Tengo hambre ahora —protestó Yoongi.

 

La risa tranquila de Taehyung llenó la pequeña ducha.

 

—Quiero decir hambriento de sangre bebé, no de mi polla en tu culo.

 

Yoongi empujó el labio inferior, haciendo pucheros.

 

Taehyung volvió a reír y dio un manotazo en el muslo de Yoongi.

 

—Límpiate bebé. Tenemos que ir a trabajar. Namjoon y sus muchachos estarán aquí esta noche y eso significa que todas las manos estarán ocupadas.

 

Yoongi podía pensar en tantas cosas que preferiría estar haciendo en lugar de vigilar el bar, la mayoría de ellas con Taehyung y sobre una superficie plana. Sin embargo, sabía lo importante que era el bar para Taehyung y si Taehyung decía que era necesario estar listo para el trabajo, entonces necesitaban estar listos para el trabajo.

 

¿Tal vez podría saltar sobre Taehyung después del trabajo?

 

Después  de  una  ducha,  Yoongi  estaba  sentado  en  el borde de  la cama  tirando de  sus botas cuando escuchó un fuerte golpe en la puerta. Rápidamente terminó de vestirse y luego entró en la sala para abrir la puerta.

 

—Oh, hey, Yoongi, ¿esta Taehyung por acá? —preguntó Jungkook, de pie en puntillas para mirar más allá de Yoongi.

 

Yoongi miró hacia el dormitorio.

 

—Se está vistiendo —dijo Yoongi mientras miraba de nuevo a Jungkook. El hombre parecía muy agitado. Estaba saltando de un pie a otro, retorciéndose las manos.

 

—¿Hay algo en que pueda ayudarte Jungkook?

 

—Uno de los chicos de Namjoon está abajo. Quiere hablar con Taehyung.

 

—Muy bien, vamos a estar abajo.

 

—Sólo date prisa —dijo Jungkook—. No creo que este tipo esté acostumbrado a que lo hagan esperar.

 

 Yoongi cerró la puerta y se dirigió hacia el dormitorio para contarle a Taehyung que tenían compañía. Taehyung salió antes de que pudiera llegar a la puerta. Estaba  completamente  vestido,  pero  aun  metiendo  la camisa en la cintura de sus pantalones.         

 

—Jungkook dice que uno de los chicos de Namjoon está abajo. Quiere hablar contigo. 

 

—¿Ah?

 

Yoongi se encogió de hombros.

 

—Jungkook parecía realmente nervioso.            

 

Taehyung asintió.

 

— Siempre se pone así cuando Namjoon y sus chicos aparecen.

 

Yoongi negó con la cabeza.

 

—No, no creo que eso sea todo. Jungkook parecía estar realmente asustado.

 

—Hmm —Taehyung miró pensativo, con las cejas dibujando arcos mientras fruncía el ceño.

 

Y eso preocupó a Yoongi.

 

Había estado demasiado enfermo como para jurar fidelidad a Namjoon antes de que el hombre se fuera. Tal vez este era el lugar donde caía el otro zapato.

 

Tal vez Namjoon iba a rechazar la entrada de Yoongi en su aquelarre. Con Taehyung siendo aceptado, Yoongi sería apartado de él, no se le permitiría entrar en el territorio de Namjoon incluso para ver a su pareja de vida.          

 

Él moriría.          

 

—¡Yoongi!         

 

—¿Qué? —La cabeza de Yoongi giró de golpe y miró a Taehyung, sorprendido por el fuerte tono en la voz de Taehyung. Taehyung no había gritado a Yoongi en... nunca.       

 

—Bebé, cálmate.            

 

Yoongi no pudo evitar inclinarse hacia la mano que Taehyung colocaba contra la mejilla. Cualquier contacto con el hombre le traía placer y tranquilidad.

 

—Se están transmitiendo tus sensaciones por todo el lugar Yoongi. Necesitas tomar una respiración profunda y calmarte. No voy a dejar que nada te pase. Te lo prometo.

 

—Pero…

 

—Suficiente Yoongi —dijo Taehyung mientras apretaba su dedo contra los labios de Yoongi—. Vamos a ir abajo y ver lo que este tipo quiere. Estaba esperando a Namjoon y a sus muchachos esta noche ¿recuerdas? Estoy seguro de que está aquí sólo para asegurarse de que todo está listo para ellos.

 

Los hombros de Yoongi se hundieron. Taehyung estaba en lo cierto  y  lo  sabía.  Estaba  comprando  problemas  cuando posiblemente no había ninguno.             

 

Taehyung sonrió y acarició la cara de Yoongi.

 

—Sólo déjame encargarme de esto, bebé.         

 

Eso era mucho más fácil de decir que de hacer. Taehyung no tenía ni idea de cómo se hacían las cosas en el mundo de los vampiros. Incluso si era el dominante en la relación, Yoongi seguía siendo responsable de la conducta de Taehyung porque Taehyung era un humano en el mundo de los vampiros.              

 

Y Yoongi estaba aterrorizado de perder a Taehyung. Si Taehyung insultaba al hombre equivocado, podría ser visto como un desafío. Si rompía una ley vampírica, podría ser visto como un desafío. Si no se rendía a la voluntad de Namjoon, podría ser visto como un desafío. Infiernos, si hablaba fuera de turno, podría ser visto como un desafío.

 

Y todos los desafíos eran a muerte.

 

Tan dominante como Taehyung era en su relación, nunca iba a ganar un desafío. Sólo Yoongi podía hacer eso y no tenía dudas acerca de no lograrlo, no porque no fuera lo suficientemente fuerte, sino porque no era un luchador.

 

Pero por Taehyung, podría convertirse en cualquier cosa.

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